P. O. (Corresponsal en Guinea Ecuatorial)

(3/4/2008)

Guinea Ecuatorial aparece hoy como una ciudad muerta.  Todos los comercios, mercados, instituciones y empresas, han paralizado su actividad. El motivo es, aunque parezca increíble, las «primarias» del PDGE, el partido político del presidente Teodoro Obiang Nguema. De esta forma, da la impresión que todos los guineanos pertenecen a esa formación política.

El martes pasado, el Ministerio de Trabajo publicó una orden por la que se obliga a las empresas a cerrar sus actividades durante cuatro horas, para que sus trabajadores acudan a participar en los comicios internos del PDGE, que se han dado en llamar «primarias». Los edificios públicos permanecen cerrados como siempre en estos casos.

Esta decisión se tomó el viernes, día 28 del mes pasado, en el transcurso de una tensa reunión  del Comité Ejecutivo del PDGE, que tuvo lugar en la sala de conferencias de Ngolo, presidida por el mismo Teodoro Obiang Nguema. Los enfrentamientos habidos en esa reunión dieron lugar a que la misma se alargara hasta altas horas de la madrugada. La facción más dura e intransigente del PDGE quería imponer listas elaboradas por el partido para las candidaturas al parlamento y ayuntamientos, mientras que el sector  más blando, era partidario de incluir «caras nuevas», para lo cual propuso se realizaran elecciones internas.

Ante la trifulca que se organizó con motivo de estas dos propuestas, tuvo que ser el mismo Obiang Nguema, el que tomara parte, inclinándose por el sector que demandaba elecciones libres e internas.

Ante el enfado monumental, los postulantes mas conservadores del partido acuden hoy a las elecciones internas con desilusión; es mas, según algunas voces del partido, siempre en boca pequeña, se preguntan cómo Obiang puede querer renovar cargos apartando a los que «tanto hemos sufrido y sacrificado nuestras vidas por él y por el partido sin que él mismo se aplique el cuento».

Los más conservadores del partido, argumentan que los que demandan elecciones internas quieren introducir elementos más duros, si se quiere subversivos, en el Parlamento para que con el escudo del PDGE, puedan introducir otros métodos de trabajo.

Esto no ha hecho más que empezar, de aquí al 4 de mayo, día de las elecciones generales y municipales se esperan muchas más sorpresas. Es evidente el nerviosismo que se aprecia dentro del PDGE, y en el presidente, sobre todo después de conocerse los resultados de las elecciones de  Zimbabwe que han dejado en la cuerda floja a Robert Mugabe, amigo y homologo de Obiang Nguema.