espacioseuropeos.com (3/5/2008)
UP (Unión Popular), que lidera Faustino Ondo Ebang Nchama, tras declarar la nulidad de las elecciones convocadas para el 4 de mayo por el dictador Teodoro Obiang Nguema, hace un «llamamiento a la abstención total en las elecciones fraudulentas legislativas y municipales que se llevarán a cabo el próximo domingo día 4 de Mayo de 2008».
Por su parte, DECAM (Demócratas por el Cambio), en un comunicado «llama la atención del pueblo de Guinea Ecuatorial y de la opinión pública internacional sobre el camino que el régimen tiránico de Teodoro Obiang está conduciendo la crisis política que agoniza el país con la celebración de nuevas elecciones en un ambiente marcadamente antidemocrático, donde la libertad ciudadana es lo que menos cuenta».
Sin embargo, un matiz separa a la plataforma DECAM de otros grupos opositores, y es un «replanteamiento de la transición democrática, que solo se puede lograr mediante un amplio consenso entre el régimen y todas las fuerzas vivas de la nación, tanto del exilio que del interior, para reconducir la ya malograda transición democrática».
En este comunicado de DECAM, plataforma que coordina Pedro Germán Tomo Mangue, se recuerda el inicio de unas conversaciones entre el Gobierno de Guinea Ecuatorial y esta plataforma: «DECAM se dirigió a Teodoro Obiang para solicitar una negociación Gobierno-Oposición antes de abrir cualquier proceso electoral en el país, por entender que el problema de fondo no reside en el cumplimiento del calendario electoral sino en la falta de un compromiso político tácito del régimen para garantizar el ejercicio político conforme a los presupuestos legales, es decir, Estado de derecho e imperio de la Ley. Hasta la fecha DECAM no ha tenido una respuesta satisfactoria del régimen de Malabo».
Por todo ello, DECAM «invita a los ciudadanos y a los electores a la abstención, porque estas elecciones, al igual que otras tantas que ha venido organizando el régimen, no reúnen las mínimas condiciones democráticas ni se realizan en un ambiente de libertad que permita respetar la opinión expresada en las urnas».