espacioseuropeos.com (15/7/2008)
El aspirante demócrata a la Casa Blanca, Barack Obama, se ha comprometido a revisar su postura sobre la posibilidad de retirar las tropas estadounidenses destinadas en Irak. Desde el comienzo de la campaña electoral, Obama se ha declarado contrario a la invasión de Irak, aunque ante el hecho consumado de que existen tropas en Irak, se ha declarado cauto a la hora de una retirada toral, ya que antes quiere «asegurarse de que cualquier retiro de las fuerzas de su país sea ordenado y seguro«.

«Siempre dije que escucharía a los comandantes en terreno. He dicho que el ritmo del retiro sería dictado por la seguridad de nuestras tropas y la necesidad de mantener la estabilidad», manifestó en una rueda de prensa en Dakota del Norte.

Tras las furibundas críticas del candidato republicano, John McCain, Obama se ha comprometido a visitar Irak y Afganistán este verano.

La polémica sobre el estacionamiento de tropas en Irak y Afganistán, se recrudece cuando el domingo  pasado, nueve soldados estadounidenses murieron a consecuencia del ataque de una base militar de EE. UU., en una zona cercana a la frontera con Pakistán.

Por otro lado, Estados Unidos ha abandonado la posibilidad de llegar a un acuerdo con el actual gobierno iraquí, acerca del  estatus de las fuerzas militares y demás funcionarios destinados en Irak.