espacioseuropeos.com (29/7/2008)
Una vez más tenemos que lamentar la actitud de sumisión y pleitesía, por no mencionar la falta de dignidad, del Gobierno de José Luís Rodríguez Zapatero, ante las constantes provocaciones de Marruecos. Ayer lunes, en Madrid, el ministro marroquí de Economía y Finanzas, Salaheddine Mezouar aludió a que Ceuta y Melilla son «ciudades marroquíes».
Mezouar, afirmó que para Marruecos «está claro que Ceuta y Melilla son ciudades marroquíes, pero no va a crear un conflicto por ello dado que España es un país amigo y el tiempo va a gestionar esto».
Estas declaraciones las hace el Gobierno de Marruecos pocos días después de que el ministro español del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, declarara en Rabat que ha «constatado» con su homólogo marroquí, Chakib Benmoussa, la «excelente relación» que existe entre las fuerzas de seguridad de ambos países. Según Rubalcaba, las relaciones entre España y Marruecos son «extraordinariamente cordiales y positivas».
Si estas son las relaciones entre dos países amigos, ¿cómo serán las que existan entre países enemigos?
¿Cuál sería la respuesta de Marruecos si España aludiese a que Ifni, Nador, Tánger, Mazagán, o cualquier otra ciudad, otrora Protectorado Español, son «ciudades españolas»?