espacioseuropeos.com (17/9/2008)
El pasado jueves, el Presidente afgano, Hamid Karzai, se manifestó públicamente en contra de la ocupación permanente de su país por «soldados extranjeros»: «Obviamente la comunidad internacional no estará aquí por mucho tiempo y no sería bueno para nosotros que permanezca aquí mucho tiempo. Somos un país con una historia de varios miles de años y estamos orgullosos de nuestra historia y de nuestra valiente nación. No deberíamos depender de las fuerzas extranjeras para nuestra seguridad por mucho tiempo», declaró el Presidente.

Estas declaraciones están motivadas por el creciente descontento de la población afgana que viene soportando continuos «efectos colaterales» por parte de las fuerzas de la OTA que lidera Estados Unidos. Uno de los «errores» más graves ha sido el que tuvo lugar el 22 de agosto, llevado a cabo por fuerzas de la OTAN  que bombardearon la aldea de Azizabad, situada al sur de la ciudad de Herat (Afganistán), matando a 91 civiles,  61 de los fallecidos eran niños menores de edad.

Al poco de conocerse la noticia, el mando militar de Estados Unidos hizo público un comunicado en el que se decía que había eliminado a una treintena de talibanes y que «por error, habían muerto algunos civiles, quizás tres mujeres y dos niños».

Este último bombardeo contra la localidad de  Azizabad ha exacerbado las protestas públicas por los ataques aéreos estadounidenses en Afganistán, obligando al Presidente Karzai -impuesto por Estados Unidos- a realizar este tipo de declaraciones.

Los familiares de los civiles muertos en este ataque han propuesto desenterrar a sus seres queridos para demostrar que hubo un gran número de víctimas civiles. Por otro lado, el mando militar estadounidense ha anunciado que realizará una nueva investigación.

Si esos civiles muertos hubiesen sido occidentales, ¿qué represalias hubiera habido?

No hay etiquetas para esta entrada.