Aquilino Tejedo (17/11/2008)
Metidos en la crisis económica y camino de la recesión parece algo fuera de lugar que el Ayuntamiento de Madrid, presidido por el alcalde Alberto Ruiz-Gallardón dedique 70.000 euros a anunciarse a través del equipo de baloncesto de la Universidad de Georgetown, en Washington.

 Mientras Gallardón ha hipotecado a Madrid con una deuda ingente, al tiempo que sube los impuestos y fríe a los ciudadanos con una política de multas gravosas, la concesión de ese dinero, so capa de una publicidad de resultados inciertos, presenta circunstancias harto sospechosas.

 En la Universidad de Georgetown, que ocupa el puesto 23 en el National Universities Rankings, imparte algunas «clases magistrales» José María Aznar, el marido de Ana Botella, concejala del Ayuntamiento madrileño incluida en la lista electoral de Gallardón, sin duda para contar con el apoyo de los aznaristas de cara a su futura carrera política más allá del municipio de Madrid.

Con el apoyo económico a la Universidad de Georgetown se da ocasión al PSOE para difundir que se devuelve a aquella Universidad lo que la misma paga a Aznar «vía conferencias». De poco valen los desmentidos llevados a cabo. La portavoz adjunta del Grupo Municipal socialista, Ángeles Álvarez, aparece cargada de razón para la denuncia que ha hecho del caso.

Por si fuera poco, la Universidad de Georgetown, es de los jesuitas y Gallardón, antiguo alumno de la Compañía ignaciana. Y ejerce como tal.

Está claro que la jugada supone una carambola.