espacioseuropeos.com (2/1/2009)
Como suele ser habitual, existe una separación entre lo que piensan los ciudadanos y los Gobiernos. Estados Unidos no es una excepción.  El pasado martes, miles de personas se manifestaron en varias ciudades para protestar contra el ataque israelí a Gaza.

En una «jornada nacional» de protesta, en Nueva York se concentraron varios miles de personas frente al consulado de Israel. En Washington, otros miles hicieron otro tanto, pero en esta ocasión ante el Departamento de Estado.  Otras ciudades, como Los Ángeles, Dearborn, Tampa, Fort Lauderdale, Lexington y Cincinnati.

En Hawai -informa la cadena Democracy Now-, «un grupo de manifestantes se reunió cerca del lugar de vacaciones del Presidente electo Barack Obama para protestar contra su supuesto apoyo al ataque de Israel». Un grupo de manifestantes se concentró en una casa que suele alquilar la familia Obama para pasar sus vacaciones, portando pancartas con la siguiente leyenda: «Los habitantes de Gaza necesitan alimento y medicamentos, no guerra».

Hasta ahora, Obama no se ha manifestado públicamente sobre los ataques a Gaza, aunque si lo han hecho la mayor parte de sus asesores, manifestando su «apoyo» a Israel.