iglesia-de-san-patricioespacioseuropeos.com (16/3/2009)
Durante el año 2008, la Iglesia Católica de Estados Unidos se vio obligada a pagar más de 400 millones de dólares por asuntos de pederastia en los que estaban involucrados sacerdotes. En ese año se formularon 620 denuncias por abusos sexuales cometidos años atrás.

La mayor parte de esos 400 millones de dólares los gastó la Iglesia Católica estadounidense para hacer frente a las denuncias contra sacerdotes pederastas. Una parte muy importante de ese dinero fue para abonar indemnizaciones a las víctimas, según datos oficiales. La Iglesia gastó más de 23 millones de dólares en luchar contra los abusos de menores -aunque desconocemos el método empleado-, otros 22 en terapia para las víctimas y 374,4 en indemnizaciones a unas 500 personas que siendo menores habían sido objetos de abusos sexuales.

Según datos de la propia Iglesia (Conferencia de Obispos católicos de Estados Unidos), la mayoría de los casos de abusos sexuales sucedieron hace unos 35 años.

Francis George, cardenal de Chicago y presidente de la Conferencia, con motivo de la presentación de un estudio relacionado con estos casos, manifestó  que «con nuestras oraciones, acciones y empeño en la protección de los niños, estamos trabajando para hacer que el mundo sea más seguro para todos los menores. Nosotros y la Iglesia vamos por el buen camino».

Si el Cardenal lo dice…