espacioseuropeos.com (12/6/2009)
A principios de esta semana, la Administración Barack Obama anunció «una serie adicional de cambios regulatorios para la supervisión de la industria financiera», según informa Democracy Now. El diario «Wall Street Journal» publicó que la Casa Blanca dejaba sin efecto varias de las promesas que el presidente Obama había hecho.
Entre esos incumplimientos, uno de los más importantes ha sido el de dejar sin efecto los topes salariales a los ejecutivos de las compañías beneficiarias del «rescate financiero» que el Gobierno había concedido no sin problemas en el Legislativo. En el plan inicial se estipulaba un salario máximo de 500.000 dólares.
Esta medida se produce un día después de que la Administración Obama autorizara a que diez empresas habían sido autorizadas a devolver los préstamos recibidos del «rescate financiero», «que el Departamento del Tesoro autorizara a diez de las mayores empresas beneficiadas con dinero del rescate financiero a devolver alrededor de 68.000 millones de dólares de los préstamos de los contribuyentes».