espacioseuropeos.com (1/8/2009)juan-manuel-inciarte-gallardo
El etarra Juan Manuel Inciarte Gallardo, alias «Buto» y «Jeremías», se encontraba en situación de «busca y captura» desde el 30 de julio del año 1991. Desde hace varios años estaba afincado en México. Pero, el pasado día 6 nada más llegar al aeropuerto internacional de Barajas, Juan Manuel Inciarte Gallardo era  detenido por miembros de la Policía Nacional

El etarra llegaba de México, país que le había expulsado; al parecer un denunciante anónimo había puesto en conocimiento de la policía federal mexicana «su» descubrimiento, y en consecuencia las autoridades de México lo expulsaron. No se puede dudar que tras esa denuncia anónima se encontraba la «inteligencia» española.

El caso es que, alertada la Policía Nacional, nada más pisar suelo español, Juan Manuel Inciarte Gallardo era detenido. Con 54 años a sus espaldas, «Buto» o «Jeremías», tenía un amplio historial de asesinatos. Había pertenecido al «comando Vizcaya». El 4 de mayo de 1983 cometió su primera acción terrorista. Dos policías nacionales, Julio Segarra Blanco y Pedro Barquero González, y la esposa de éste último, María Dolores Ledo García (en avanzado estado de gestación).

Un año más tarde, en julio de 1984, asesinó en Portugalete (Vizcaya) al guardia civil Antonio Torrón Santamaría. Y en agosto de ese mismo año también participó en un atentado con bomba en una comisaría de Policía de Bilbao, donde por fortuna no hubo víctimas. En el mismo mes, y a través de una «lanzadera de granadas», atentó contra  una casa cuartel de la Guardia Civil, resultando heridos de gravedad los guardias civiles, Antonio Marín Ibáñez y Juan Cortés Espinosa, y la niña de nueve años, Eva Ferreiro.

El historial del etarra Inciarte Gallardo no acaba, ya que el 26 de mayo de 1985, asesinó al policía, Moisés Cosme Herrero Luengo, en la localidad de Getxo. Este policía se encontraba acompañado de su hijo de tres años de edad. Pocos días después, mató en Vizcaya al guardia civil Eugenio Recio García.

Que se sepa, al año siguiente, bien juan-manuel-inciarte-gallardo-al-llegar-a-barajaspor decisión de la cúpula etarra o a consecuencia de los «acuerdos de Argel», el caso es que Inciarte Gallardo se trasladó a  Nicaragua. Al ver que su estancia no era excesivamente segura en ese país decidió abandonarlo y asentarse en otros. En México ha estado desde 1966, año en el que los servicios secretos españoles detectaron su presencia.

¿Ha tenido algo que ver su expulsión de México -y posterior detención- con los atentados de ETA en Mallorca? Posiblemente, sí. Quizás el Gobierno de España ha mandado un mensaje a la dirección etarra con esta detención, y otras que se van a producir: «Nosotros también podemos haceros mucho daño si continuáis así…»