espacioseuropeos.com (22pobreza/10/2009)
La realidad social española nos muestra un país injusto, con niveles de pobreza que superan el 20 por ciento de la población y donde la corrupción, a pesar de la benevolencia de la Justicia, nos aproxima al Chicago de los años 30.

Los datos que nos ofrece la encuesta realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre la estructura salarial en nuestro país nos muestra las graves desigualdades que padecen los trabajadores. Un trabajo del sindicato CGT nos ofrece los siguientes datos basados en el estudio del INE:

La Estructura Salarial y la Política de Impuestos reflejan la desigualdad e injusticia social que existe como consecuencia de la clase social, del género, del país de origen o del territorio donde se trabaja.

La posición que se ocupa en la escala social y en la empresa
Los directivos de las empresas de más de 10 trabajadores reciben 61.660,60 euros, tres veces más que el salario medio (20.390,35 euros).

Ser hombre o mujer
El salario medio anual se sitúa en 20.390,35 euros. Los hombres perciben una media de 22.780,29 euros y las mujeres de 16.943,8. Esta desigualdad se padece en todas las franjas salariales (en la franja alta las remuneraciones de la mujer son menores en un 50 por ciento; en la franja media son significativamente menores; y en la franja baja, las mujeres que perciben el SMI (Salario Mínimo Interprofesional) suponen casi 3 veces la de los hombres).

La nacionalidad
Un asalariado nacional (media de ambos sexos), percibe 20.390 euros. Si procede de un país europeo no perteneciente a la UE, cobra 12.630 euros; y si es de algún país de Hispanoamérica percibe 13.494.

Lugar de residencia
Una persona asalariada que reside en Madrid percibe 24.242,08 euros, mientras que una que  trabaja en Extremadura, cobra 16.298,30. La desigualdad entre el extremo alto y el bajo, supone unos 8.000 euros; o sea, un 33 por ciento menos.

El tipo de contrato laboral
Si la persona asalariada tiene un contrato temporal (+ de 5 millones de personas), su salario medio anual disminuye en un 31,4 por ciento respecto a la de un asalariado con contrato indefinido.

El sector laboral
En el sector financiero, el salario medio es de 38.870,30 euros, mientras que en el de hostelería se sitúa en 14.000,12. «Esta desigualdad social reflejada en la estructura salarial aumenta o disminuye según las políticas fiscales que se apliquen, pudiendo servir de corrección o de agravante de dicha desigualdad. Las políticas fiscales progresivas, redistribuyen la renta ya que contribuyen más quienes perciben más rentas mientras que con las políticas fiscales regresivas, quienes menos perciben, que somos la mayoría, financiamos las rentas y patrimonios de la minoría rica», recoge el sindicato CGT.

Las políticas fiscales, desde la entrada en vigor del Tratado de Maastricht (1993) de los distintos gobiernos del estado español, se han puesto al servicio de las rentas más altas y de las empresas multinacionales, de acuerdo con la misma fuente.

Otrmendigosos datos que aporta ese estudio, son que la sanidad pública se encuentra en total regresión, que los subsidios de desempleo «no garantizan ni en cuantía ni en tiempo la posibilidad de una vida digna»; las pensiones siguen «sin cubrir las necesidades vitales para llegar a la suficiencia». Por otro lado, se recoge que «no existen escuelas infantiles públicas suficientes» y que «no se protege a las personas con dependencia; la pobreza relativa y absoluta o la exclusión agarra cada vez a más personas».

Por lo que se refiere a la medida fiscal de subir el IVA, adoptada en los Presupuestos Generales del Estado, aprobados con el apoyo del PNV y Coalición Canaria, para el 2010, «no sólo es una estafa por requerir, de la inmensa mayoría de la población, que transfiramos nuestras escasas rentas salariales (el 63por ciento de la población asalariada percibe menos de 1.100 euros) y nuestras exiguas prestaciones de desempleo (medias de 833 euros) y/o pensiones (medias de 735 euros), a las arcas públicas, a través del IVA general en el consumo vital (alimentación, transporte, energía), sino que, además, actúa en el sentido contrario de la equidad, pues el sistema financiero, sigue con los avales y fondos de reserva garantizados con dinero público, los empresarios que son quienes destruyen empleo y despiden a miles y miles de personas, siguen percibiendo de las arcas públicas más de 10.000 millones de euros por medio de políticas denominadas «fomento de empleo» y reducciones significativas de sus impuestos (bien de rentas de capital, bien de impuestos de sociedades)».

Para la CGT «no existen políticas diferenciadas en ninguna «fuerza» política. Todas persiguen lo mismo: asegurar el mercado privado, el sistema capitalista y la tasa de ganancia de los ricos, patronal, directivos, altos cargos». Este sindicato opta por la «ruptura con este modelo», lo que dará -afirma su documento- «una posibilidad a las personas y al planeta, para poder tener una vida digna basada en la justicia social para todos y todas».