J.M.G.T. (23/2/2010)
«Nuestro objetivo es la integración como miembro de pleno derecho de la Unión Europea», ha manifestado, en Madrid, el primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan. Añadió que no pueden aceptar ninguna otra fórmula, así como que la velocidad que llevan las negociaciones está lejos de las expectativas de Turquía. Este pasaje formaba parte de la conferencia que impartió en el desayuno organizado por el Foro de la Nueva Economía.
Actuó de presentador el presidente del Senado de España, Javier Rojo, el cual constató que Erdogan viene manteniendo una política de aproximación con España, «que tiene un largo recorrido». Es el momento -dijo- de intensificar las relaciones económicas, sin olvidar las culturales.
El primer ministro turco, considera significativo, en cuanto a la intensificación que se lleva a cabo de las relaciones bilaterales, el hecho de que se realiza una cumbre hispano-turca cuando la agenda española es muy apretado, por la presidencia rotatoria europea que le corresponde.
No deja de sorprender su alusión, como referencia histórico-cultural, a que Cervantes tal vez no hubiera escrito «El Quijote» de no haber estado preso por la lucha con Turquía. Y ahora, el Instituto Cervantes se extiende por el mundo.
Erdogan dejó establecido que, en esta época de la globalización, sigue profundizándose la brecha entre el Norte y el Sur. Así prevé que el sistema no tiene futuro.
Insistencias con Obama
Mostró su satisfacción por formar parte de la co-presidencia hispano-turca de la Alianza de Civilizaciones. A su juicio, no debe existir un choque de civilizaciones. Dio a conocer que ha hablado de ello con el presidente estadounidense Barack Obama, como también lo han hecho -aseguró- el presidente Zapatero y el Rey de España. Espera que Obama se incorpore a la Alianza de Civilizaciones.
Cuantificó Erdogan en 300 las compañías españolas que operan en Turquía y en 67 las de origen turco con actuación en España, y espera que aumenten las inversiones de un lado y del otro.
También puso de relieve el interés, entre los jóvenes turcos, por el idioma español, «uno de los más hablados -subrayó- del mundo».
Animó, en otro aspecto, a los turistas españoles a visitar Estambul, por su singular belleza como ciudad, y otros destinos en las 81 provincias de Turquía.
Proclamó el primer ministro turco que su país pretende tener cero problemas con sus vecinos. Citó el caso de Armenia, sobre el cual da por hecho que existe buena disposición para superar problemas (en espacioseuropeos.com se ha informado en otros momentos sobre problemas históricos). Durante el coloquio posterior aseguró que «ha empezado un nuevo proceso», si bien está pendiente de pasar por el Parlamento el acuerdo firmado entre los dos países.
En cuanto al objetivo de normalizar las relaciones Azerbaiyán-Armenia, indicó: «Nosotros somos parte de la solución».
Sobre la cuestión de Chipre afirmó que Turquía se esfuerza por alcanzar una solución justa. Además insistió en que la adhesión greco-chipriota a Europa se resolvió por una decisión política y que no deben cambiarse las reglas de juego para otro país.
Cerró muy brevemente la sesión, Senén Florensa, en representación del Instituto Europeo del Mediterráneo, entidad que patrocinaba el acto, con «The Wall Street Journal».
Noticias de referencia:
* Carta abierta al Gobierno Suizo: Con relación a sus proposiciones sobre “La cuestión Armenia”
* Reflexión: Armenia y el síndrome del “Titanic”
* La comunidad armenia en Estados Unidos acusa al Presidente Barack Obama por no reconocer el genocidio armenio de 1915
* Por primera vez, el genocidio armenio, a debate en una televisión nacional
* Libro de Gurriarán, premiado en Marsella
* José Antonio Gurriarán: Periodismo a prueba de bomba