espacioseuropeos.com (21/3/2010)mohamed-vi
La monarquía alauita, continúa con la expulsión de cristianos en todo el territorio de Marruecos. Antes de la cumbre de Granada entre la UE y Marruecos, durante y después de ella, el gobierno marroquí permanece cerrado a permitir la más mínima libertad religiosa en su territorio.

Así, en este mes de marzo, la monarquía alauita ha procedido a expulsar a  más de70 cristianos, de todas las tendencias, bajo la acusación de intentar evangelizar a musulmanes. De acuerdo con distintas fuentes, el mayor número de estas expulsiones se produjo mientras se desarrollaba en Granada la primera cumbre en la historia entre la Unión Europea y Marruecos, lo que muchos analistas han interpretado como auténtica osadía de Mohamed VI.

La mayoría de los 27 expulsados esta semana son cristianos  evangélicos anglosajones, que fueron detenidos durante la celebración de su culto dominical en la iglesia protestante de Marrakech. Entre los expulsados hay un sacerdote franciscano.

Organizaciones cristianas están difundiendo por Internet una carta, dirigida al embajador de Marruecos en España, y un correo electrónico –correo@embajada-marruecos.es-, con la finalidad de protestar por la expulsión de estos cristianos.

Texto de la carta
El texto de la carta es el siguiente:

Distinguido Sr.:
Relacionado con las recientes expulsiones de hasta 70 cristianos bajo la acusación de intentar evangelizar a musulmanes, quisiera manifestarle lo siguiente:
Las democracias occidentales deben defender el criterio de que los derechos fundamentales el hombre son universales y que entre ellos ocupa un lugar el derecho a la libertad de religión, porque es el fundamento de la libertad de conciencia, y de otros derechos  y libertades: «Cada uno tiene el derecho de honrar a Dios siguiendo la norma justa de su conciencia» (Encíclica Pacem in terris, 1963). La Declaración Universal de Derechos Humanos, los Pactos de Naciones Unidas, así como la legislación europea establecen el derecho a la libertad religiosa.

Por estos motivos le pedimos una actuación decidida cerca del Gobierno de Marruecos para garantizar:

– La libertad de adherirse o no a una fe determinada y a la comunidad confesional correspondiente.

– La libertad de anunciar y de comunicar la enseñanza de la fe, de palabra y por escrito, incluso fuera de los lugares de culto, y de dar a conocer la doctrina moral sobre las actividades humanas y la organización social.

– La libertad de recibir y de publicar libros religiosos sobre la fe y el culto, y de usarlos libremente.

– Así como la readmisión en el país de los cristianos expulsados.

Confío en su buen criterio y en su sensibilidad para con la justicia y la libertad religiosa y de expresión.
Atentamente,

No hay etiquetas para esta entrada.