J.M.G.T. (11/3/2010)presidente-junta-de-extremadura
La conferencia-almuerzo-coloquio con el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, como invitado principal en el Foro de la Nueva Economía, ofreció algunas sorpresas. La primera, el lleno hasta la bandera -unos 700 comensales al parecer, en total- por lo que se refiere a políticos, empresarios y especies varias, mientras que sólo había poco más de  media entrada  de representantes de medios de comunicación en funciones informativas.

También extrañaba que el presentador en Madrid del presidente de una Comunidad Autónoma española fuese un diplomático extranjero y así empezó por reconocerlo el elegido, Álvaro de Mendoça e Moura, embajador de la República Portuguesa en España. Entendía que lo justificaban relaciones oficiales y de amistad. Entre los datos que aportó sobre el orador figuraban su profesión de médico forense y, de su trayectoria política, el haber sido anteriormente director general y consejero en la Autonomía extremeña. Valoró su apuesta por las relaciones con Portugal y, entre otros aspectos, por lo que se refiere a la promoción del estudio del idioma portugués.

Fernández Vara inició su parlamento  refiriéndose a Europa, con la preocupación por que lo que fue una esperanza no se torne en una frustración. Con veintisiete países cabe el riesgo, apuntó, de volver a la tendencia a la renacionalización por parte de los integrantes.

La demografía como problema
Europa, señaló, por otro lado, se nos está quedando vieja, en lo que a la demografía se refiere. Y tanto el continente europeo, como España en particular, si no ganan población, tendrán problemas.

«Hemos vivido -afirmó- por encima de nuestras posibilidades». Considera que hay que tomar medidas, algunas de ellas dolorosas, y las administraciones públicas han de dar ejemplo. Pidió perdón por no haberlo pensado antes.

Pasó revista a diversas facetas de la realidad de Extremadura. Evocó que se había presentado a las elecciones ofreciendo 60.000 empleos y que ahora cuenta con 40.000 parados más. La situación no la solucionará el simple paso del tiempo, si no se realizan acciones concretas.

Expuso que el 50% de las exportaciones extremeñas van a Portugal y que existe la necesidad de encontrar nuevos mercados extranjeros; en ese sentido, han constatado que Angola y Túnez vienen funcionando bien.

Dio a conocer que él es de Olivenza, localidad de la que una canción tradicional pregona que las muchachas de allí «no son como las demás, porque son hijas de España y nietas de Portugal». Él se lo aplicó también, en calidad de muchacho, por supuesto.

El broche final lo puso una afirmación tajante: «Desde Extremadura voy a ayudar a Zapatero todo lo que pueda».

 Hasta ahí, la intervención sonaba a soliloquio, sin transmitir tanto como podía haberse esperado. En el coloquio, Fernández Vara reconoció que cobra 4.100 euros mensuales y si él y su entorno se bajaran un 10% -que planteaba la pregunta- habría problemas, ya que funcionarios de su Administración cobrarían más que ellos.

Otro plan de pensiones
Reconoció que tiene contratado un plan de pensiones privado, desde hace unos 18 años

Sobre Zapatero reconoció que está pasando por un momento difícil y el extremeño subrayó que él no admite las deslealtades. Sólo le faltó decir, parafraseando a  la ex-novia del de Ubrique, que él, por ZP, mata. Por cierto, hablando de toros, aportó que en su tierra extremeña hay 200 ganaderías de reses bravas, algo que cuenta como factor económico.

Fernández Vara se declaró católico, contrario al aborto, pero favorable a la ley que va a regularlo. Respeta la cláusula de conciencia de los profesionales implicados de la Sanidad pública puesto que considera que viene dado por la Constitución.