espacioseuropeos.com (25/5/2010)delta-del-niger-mundo-negro
Los representantes de cerca de 20.000 antiguos integrantes de los grupos rebeldes que aceptaron el programa de amnistía ofrecido el año pasado por el Gobierno de Nigeria, han asegurado su apoyo al nuevo presidente Jonathan Goodluck, que a su vez se ha comprometido a garantizar el proceso de pacificación de la región meridional del Delta del Níger, rica en hidrocarburos pero a la vez una de las más pobres del país.

En un comunicado difundido hace unos días, los ex rebeldes insistieron en las exigencias de preservar el medio ambiente, de respetar los derechos de los habitantes de la zona a una existencia digna, y de garantizar el desarrollo socio económico de la región, destacando al mismo tiempo que la llegada a la presidencia federal de un hombre político nativo del estado del Delta del Níger es un estímulo para «apoyar y consolidar el proceso comenzado con el anterior presidente Yar’Adua«.

El anuncio se produce a dos semanas del comienzo del programa de rehabilitación social y laboral, que el gobierno ha promovido para la reinserción en la vida civil de 20.191 ex-combatientes.

A partir del 1 de junio comenzarán los primeros cursos profesionales para cerca de 2.000 ex-rebeldes, que recibirán también incentivos económicos para iniciar y administrar pequeñas empresas, según informaron los medios de comunicación nigerianos.

Los rebeldes del Delta del Níger lucharon en protesta contra la explotación y la devastación del medio ambiente de la región, pidiendo al mismo tiempo una más justa distribución de las ganancias de los recursos petrolíferos, también en provecho de los habitantes del Delta.

N. de la R.
Esta noticia se publica con la autorización de Mundo Negro.