espacioseuropeos.com (9/5/2010)
Els Borst, ex ministra de Sanidad Pública holandesa ha cuestionado «la competencia de los médicos en el tratamiento del cáncer», según recoge Radio Nederland. De acuerdo con las declaraciones de la doctora Borst, los pacientes de cáncer deben «acudir a otro profesional si el médico tratante (sic) no especifica su experiencia en cierto tipo de intervenciones quirúrgicas».
Para la ex ministra de Sanidad es «inaceptable la resistencia de algunos médicos a revelar información sobre su competencia de cara a una operación«. La misma opinión la sostiene el actual ministro, Ab Klink, que ha dado un plazo de un año a los centros sanitarios para «imponer la medida a sus facultativos».
Las declaraciones de Els Borst y de Ab Klink se han producido en respuesta a una investigación llevada a cabo por la organización KWF Reina Guillermina, especializada en la lucha contra el cáncer «que señala diferencias en la calidad de las intervenciones realizadas en los hospitales holandeses«.
En su informe, esta asociación concluye que el «paciente tiene mayores o menores probabilidades de sobrevivir a la enfermedad según el hospital donde sea tratado». En la misma línea se han manifestado las compañías aseguradoras del ramo de la salud, que cuestionan las «complejas intervenciones llevadas a cabo por especialistas sin experiencia suficiente».
El informe propone, además, la concentración de la atención oncológica en centros especializados.
Por otro lado, la ex ministra de sanidad holandesa -que promovió con éxito la legalización de la eutanasia durante su mandato ministerial-, ahora ha admitido que la medida gubernamental pudo ser tomada de forma precipitada, y que es mejor «concentrarse en los cuidados paliativos».
Así lo declaró en el transcurso de una entrevista mantenida con la doctora Anne-Mei The, autora de un libro sobre la historia de la eutanasia, titulado «Verlossers naast God (Bajo Dios Redentor)». «En Holanda, primero escuchamos a los políticos y a la parte de la sociedad que solicitaban la eutanasia. Obviamente, este no fue el orden adecuado», manifestó Els Borst.