espacioseuropeos.com (30/6/2010)
El FBI arrestó a diez personas, algunos de ellos ciudadanos rusos, bajo la acusación de realizar labores de espionaje en Estados Unidos. Algunos de esos presuntos espías fueron detenidos en Nueva York, Nueva Jersey, y otros en Chipre.
Los fiscales estadounidenses afirman que las «autoridades rusas habían ordenado a los hombres y mujeres que recogieran información sobre armas nucleares, la política estadounidense hacia Irán, los líderes de la CIA, políticos del Congreso y otros temas», información facilitada por la cadena Democracy Now. Uno de los detenidos es la peruana Vicky Pelaez, columnista del periódico neoyorquino El Diario, que se edita en español. Pelaez fue arrestada junto con su esposo, el uruguayo Juan Lázaro, en su residencia habitual, sita en la localidad de Yonkers, al norte de Nueva York.
Según parece, los supuestos espías han podido ser acusados de «actuar como agentes de un gobierno extranjero, pero no enfrentan cargos de espionaje«. Nueve de los detenidos han sido acusados de conspiración para lavar dinero.
Llama la atención que estas detenciones se llevaran a cabo tan sólo tres días después de la reunión que mantuvieron Barack Obama y el presidente ruso Dmitry Medvedev en la Casa Blanca, aunque observadores cualificados consideran que ninguno de los dos países quiere provocar una crisis que dañe el actual estado de buenas relaciones.
De hecho, las autoridades estadounidenses han manifestado que la «guerra fría está superada y lo ocurrido no dañará la nueva etapa de acercamiento entre ambos países».