Economía
espacioseuropeos.com (24/6/2010)euros
En la mayoría de los países europeos, sus gobiernos se dedican a averiguar quiénes son los defraudadores y a ponerlos en manos de la Justicia, pero es España, como en muchas otras cuestiones, es diferente. Aquí no se persiguen, salvo por motivos políticos o mediáticos. Este país es un paraíso para algunos. Pues bien, una vez más ha sido Francia la que ha sacado las castañas del fuego al gobierno de Zapatero.

Al parecer, el gobierno francés se ha hecho con listas de numerosos clientes de la filial en Suiza del HSBC (Hong Kong & Shanghai Banking). No es la primera vez que desde ese banco han salido filtraciones sobre depósitos bancarios. Por ejemplo, a primeros de este año, «salió» una lista con datos de más de 15.000 clientes.

A nadie se le escapa que determinados servicios de inteligencia europeos trabajan en la búsqueda y captura de evasores fiscales, pero parece que España es en esto diferente al resto.

Pues bien, ahora la Hacienda Pública española ha dado 15 días a esos 3.000 titulares de cuentas opacas para que regularicen su situación fiscal y penal. En definitiva, que al Gobierno de España le viene muy bien meter en España ese dinero y, en consecuencia, les va a perdonar las cuotas tributarias que tendrían que abonar, así como  los intereses y las sanciones correspondientes.

Sin embargo, las asociaciones de funcionarios de Hacienda (inspectores y subinspectores del ministerio de Hacienda) se muestran contrarios a que el gobierno indulte a esos presuntos evasores. Se estima que puede haber más de 60.000 millones de euros, como mínimo, que se encuentran fuera de España en paraísos fiscales.

Lo normal ahora sería que la Fiscalía Anticorrupción se pusiera en marcha, se hiciera pública la lista de esos evasores y los pusiera a disposición de la Justicia, pero mucho nos tememos que eso no pasará.