espacioseuropeos.com (2/7/2010)roberto-ramos-perea-dramaturgo-de-puerto-rico
Brotes de oposición y descontento popular frente a un poder institucional que discurre hacia un ejercicio opresivo, están instalando en Puerto Rico una situación política de fortísima tensión.  Observadores cualificados señalan hacia el senador Rivera Schatz como la «bestia negra» del proceso por algunas de sus actitudes, carentes del tacto exigible.

El pasado 30 de junio, grupos de estudiantes, profesores y otros ciudadanos, que solicitaban acceder a la Casa de las Leyes, en San Juan de Puerto Rico, fueron rechazados con gases lacrimógenos y gas mostaza. Además, golpeados por la policía, resultaron numerosos heridos.

Para el 18 de julio se preparan movilizaciones populares
Roberto Ramos-Perea
, dramaturgo puertorriqueño de talla internacional, ha difundido un escrito, con la colaboración y el apoyo de un centenar de compatriotas, del cual extraemos diversos párrafos o conceptos, en el texto que sigue.

«Un golpe de estado constitucional -afirma textualmente- acaba de consolidarse en Puerto Rico. Tras un año de que el actual gobierno del Partido Nuevo Progresista (PNP, partido que busca la anexión de Puerto Rico a los Estados Unidos), intentara y lograra exitosamente la toma de varias instituciones que sostienen el gobierno democrático de Puerto Rico, un ambiente de hostilidad seguido por temerarias acciones retadoras de la paz pública, han desembocado en acciones violentas y agresivas del actual gobierno, tanto contra los partidos de oposición, como del movimiento estudiantil organizado, los sindicatos, la prensa, así como de todos los sectores de la sociedad civil puertorriqueña».

«Esta toma del control constitucional -sigue- procede de la Rama Legislativa bajo la autoridad del Senador Lcdo. Thomas Rivera Schatz, apoyada por el gobierno central bajo el mando del Secretario de la Gobernación, el Lcdo. Marcos Rodríguez Ema, con el obvio propósito de tener a su disposición y sin disputa, el control de todos los organismos rectores judiciales, universitarios, económicos y civiles. Ante este panorama, el actual Gobernador, Lcdo. Luis Fortuño, funciona sin voluntad, sin opinión y sin presencia ni responsabilidad pública».Los incidentes comenzaron con el despido de más 20.000 empleados públicos con el pretexto de resolver el gravísimo déficit fiscal del país.

Esta decisión ha provocado un caos económico y ha empeorado la prestación de servicios públicos. Persecución contra los institutos artísticos El Gobierno, por otro lado, favorecía con contratos de cantidades calificadas de  obscenas, a cientos de asesores, contratistas, y cabilderos asociados a su partido.

Continuaron los ataques con el nombramiento al Tribunal Supremo de cuatro Jueces afiliados y militantes al partido del poder, logrando con ello la mayoría a favor del gobierno de todas las decisiones que por votación individual se hicieran en ese foro. Luego continuó con la eliminación y represión de la participación estudiantil en los procesos universitarios, supresión de derechos de exención de matrícula de atletas y artistas, entre otros, algo que llevó a los estudiantes de los 11 recintos universitarios del Estado a declarar una huelga que duró 60 días. Los estudiantes en huelga lograron negociar a través de un tribunal de primera instancia; sin embargo, los referidos compromisos fueron invalidados por el Secretario de la Gobernación, quien dijo que los acuerdos «no valen el papel en que están escritos».

El Gobierno de Puerto Rico venderá los terrenos donde se ubica la zona del llamado «Karso» del Noroeste, que recoge un tercio de los abastos de agua de todo el país, para entregarlo a manos privadas que construirán un expreso de peaje sobre la referida zona, rica ecológicamente.

Pasando por alto muchos otros acontecimientos, el Presupuesto del país fue aprobado, junto con innumerables leyes que favorecen la privatización, la descolegiación profesional, así como la repartición de fondos públicos a manos privadas.

Interviene el FBI
Los incidentes lograron un clímax cuando esta pasada semana, el FBI (Federal Bureau of  Investigation de los Estados Unidos) arrestó, por cargos de soborno, venta de influencias y otros al  senador del PNP, Héctor Martínez, mano derecha del también Senador Rivera Schatz. Una pugna pública salta a la actualidad entre Rivera Schatz y este cuerpo federal policial, en defensa de la supuesta inocencia del senador Martínez, quien ha sido asociado al narcotráfico y quien fuera grabado en medio de su acto de soborno.

thomas-rivera-schatz-senador-de-puerto-ricoComo el último de los muchos incidentes de violencia y temeridad del Presidente Senatorial, se censuró mediante la fuerza la entrada de los periodistas a las sesiones del Senado, privando al pueblo puertorriqueño de la discusión que se realizó sobre el presupuesto del país. Los incidentes llegaron a la violencia verbal y física entre senadores, y han elevado la indignación del país a un punto insostenible.

El Lcdo. Thomas Rivera Schatz ha tomado virtual control del país con sus actitudes, consideradas tiránicas y fascistas, y no se descarta que desde sus mismas gradas se inicien en estos días procesos de persecución y violencia contra otros sectores del país, apoyados por el Secretario de la Gobernación de Puerto Rico.

«Este control de facto del poder político en la Nación Puertorriqueña -se añade- viola todos los más elementales principios de la democracia y del gobierno participativo, por lo que enteramos al mundo de la actual situación de violencia contenida que existe en nuestro pueblo y que está a punto de estallar contra estos dos políticos que han tomado por asalto el poder del país. Aún cuando en Puerto Rico no existen las condiciones para un levantamiento armado popular por la obvia desigualdad de las fuerzas en pugna, una revolución de afirmación cultural y estudiantil comienza a tomar las calles y a rescatar los espacios robados por los autores de este golpe».

«Exhortamos -finaliza el escrito- a todos los medios de comunicación del mundo a que den noticia de la actual situación de la Nación Puertorriqueña y solicitamos por ende su completa solidaridad».