Sáhara/España
Salvador Pallarès-Garí (11/10/2010)mohamed-vi-y-zapatero
A raíz de las acciones de Aminetu Haidar, en diciembre pasado, de los manifestantes españoles en agosto, en El Aaiún y de los hechos de septiembre (con activistas apaleados), también en la capital del Sáhara ocupada por Marruecos, se han producido en la opinión pública, y el gobierno español unas reacciones destinadas a infundir miedo en la ciudadanía.

Se trata del miedo a que el apoyo, la colaboración con los saharauis irrite al rey de Marruecos y que éste, nos haga pagar las consecuencias.

Zapatero expresaba, en diciembre, que él debía velar por el interés general; Moratinos advertía a los «díscolos» que, en El Aaiún, se tenía que respetar la ley marroquí. En algunos foros se levantan voces que claman contra los amigos del pueblo saharaui, advirtiendo que este apoyo acarreará consecuencias negativas para los intereses económicos.

Está claro que Marruecos no tomará la independencia del Sáhara con mucha alegría. Pero, no olvidemos que su socio preferente es Francia; y que, por otra parte, necesitan tener buenas relaciones con su vecino del norte.

Todavía me sorprende ver, por cierto, como se atiza el fantasma de la pérdida de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Pero ¿no está meridianamente claro que al rey de Marruecos no le interesa que estas ciudades (frontera con Europa) sean marroquíes? Hacer retroceder, a la otra orilla del estrecho, la frontera con Europa les comportaría un trastorno económico importantísimo.

Desconozco cuál es el interés general al que se refería ZP. No creo que fuera el de los agricultores valencianos, por ejemplo, ni el de tantos otros colectivos que ven como los productos marroquíes pasan, aventajados, por delante de su casa hacia Europa. Ni a los pescadores, que se deben someter a draconianas imposiciones marroquíes. Ni qué repercusión tiene la venta -por un euro- de material militar a Marruecos. Ni condecorar torturadores, ni…

Por el contrario, un estado saharaui independiente sí que aportaría, y mucho, al interés general. Si el gobierno del Reino de España resolviera todos los problemas que creó en dejar sin cerrar el proceso de descolonización del Sáhara, podría establecer relaciones comerciales ventajosas con el nuevo estado. La primera seria la solución de una injusticia que sufre todo un pueblo.

Las posibilidades económicas del territorio del Sáhara Occidental podrían hacer un estado con un alto nivel de vida. Y el interés general español se podría beneficiar con acuerdos bilaterales.

Conducidas de una manera inteligente y respetuosa, las relaciones comerciales serían beneficiosas para el interés general, el de aquí y el de allá. El gobierno del Reino de España sólo tendría que imitar lo que han hecho antiguas metrópolis como el Reino Unido, o ¡Francia!, convirtiéndose en socio preferente del nuevo estado. Un territorio rico con recursos naturales (fosfatos, uranio, petróleo, pesca…), con posibilidades para la industria del turismo…

Por el contrario, parece que el interés general que tiene en mente ZP, Moratinos & CIA se centra en recoger las migas de pan que caen del banquete que celebra Francia con Marruecos.

La independencia del Sáhara interesa a los intereses generales que deben preocupar a ZP.

N. de la R.
Salvador Pallarès-Garí
es profesor y Presidente de ACAPS la Safor.