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A. D.  (1/2/2011)
Según el diario Haaretz, el gobierno de Israel pidió a Estados Unidos y a varios países europeos que apoyen al presidente de Egipto, Hosni Mubarak. La información la facilitó ayer lunes el diario israelí Haaretz.

Tanto Israel como Estados Unidos consideran a  Mubarak como uno de sus principales aliados en la región. Esa ha sido la razón por la que los dos países han pedido -aunque ya parece tarde-, al presidente egipcio que vaya «más lejos» con los cambios y que empiece a pensar en una «transición».

El miedo de Estados Unidos y la UE, es que Túnez y, sobre todo Egipto, contagien al resto de países árabes. Egipto es el país más poblado de la región, con más de 80 millones de habitantes, y que «desempeña un papel fundamental en el diálogo entre israelíes y palestinos», afirma la misma fuente.

La situación en el país de los faraones amenaza con agravarse ante la resistencia de los poderes públicos a abandonar el poder como piden los manifestantes. Estados Unidos, Japón y Canadá han comenzado a repatriar a sus ciudadanos, mientras se critica la pasividad de España.

Hace unas horas las Fuerzas Armadas de Egipto han hecho público un comunicado, emitido por la televisión pública, así como a todos los medios de comunicación, a través de fax, en el que se dirigen al «gran pueblo de Egipto».

Entre otras cosas, en ese comunicado se dice que «vuestras Fuerzas Armadas, reconociendo la legitimidad de las demandas de la gente, y destacando su responsabilidad para proteger a la nación y al pueblo, como siempre nos habéis confiado», y  que la «libertad de expresión pacífica está garantizada para todos», aunque «no se debe llevar a cabo ningún acto que deteriore la seguridad de la nación ni el sabotaje de las instalaciones públicas y privadas».

En otro de los puntos de ese comunicado se alerta de que «Las Fuerzas Armadas no permitirán ningún intento inaceptable por parte de los criminales de aterrorizar a los ciudadanos o deteriorar la seguridad de la nación«;  las «Fuerzas Armadas son conscientes y comprenden la legitimidad de las demandas de la honorable ciudadanía»; «Las Fuerzas Armadas están presentes en las calles de Egipto con el fin de asegurar la seguridad, y vuestras Fuerzas Armadas no han usado y no emplearán la fuerza contra este gran pueblo que siempre las ha apoyado a lo largo de su gloriosa Historia».

No hay duda, todo preparado para que Mohamed ElBaradei asuma la presidencia de un gobierno de transición, puesto para el que ya se ha ofrecido desinteresadamente. Si el programa se cumple -en caso contrario lo harán cumplir-, ElBaradei se hará con el poder, con pequeñas reformas, para que todo continúe más o menos igual.