Guinea Ecuatorial
Abaha (17/3/2011)guerrero-fang
El gabacho, enemigo de la hispanidad, sigue erre que erre, es su labor. Pretende alejar a Guinea Ecuatorial de España y, poco a poco, con la inestimable ayuda del gobierno de Zapatero lo está consiguiendo. Si antes fue Moratinos, cónyuge francesa y  apasionado amor por los caldos (vinos) franceses, ahora los que le han sustituido no le van a la zaga. Uno, una, de ellas, la ministra Trinidad Jiménez, visitadora asidua de Rabat,  anda a vueltas todavía con el inexplicable y precipitado -para nosotros no- viaje de José Bono a Malabo. Al parecer, el toledano se adelantó.

Mucho viaje a Malabo y Rabat, con empresarios, con encargos varios muy especiales, pero el caso es que Gustavo Manuel de Arístegui ha perdido plaza para conseguir la oposición a ministro del ramo, o sea de Exteriores. No sabemos a quién designará Rajoy, pero parece que Moragas gana puntos. En consecuencia, el de la «mochila», como le llamaba  Labordeta,  recibe llamadas y llamadas. Por cierto, más de un grupo de la llamada oposición a Obiang Nguema está desplegando un inusitado amor a escribir cartas.  Sobre la mesa de los partidos políticos españoles se agolpan cartas, manifiestos y amplios legajos documentales sobre las atrocidades del sátrapa. 

En España se teme -los que todavía tienen cierto sentido del Estado- que Guinea Ecuatorial caiga como lo hizo Filipinas. Vamos, que se aleje de lo español, de la Madre Patria, del idioma, de las costumbres, de todo. El gabacho trabaja en ello. Desde «La Piscina», la sede de los servicios secretos franceses, se labora con tesón desde hace muchos años para lograr que la ex colonia se integre en la francofonía. Y la Administración Obama otro tanto. A ninguna de las dos potencias les interesa tener un islote que tenga cultura hispana. Los Estados Unidos tratan, igual que lo han intentado con Puerto Rico, Filipinas y México, entre otras naciones, de que los guineanos dejen a Cervantes y  Lope de Vega por la mitología vaquera del Oeste y por la hamburguesa con cebolla y pepinillos. Menos mal que ahí están Chile, Argentina y Colombia, para defender lo Hispano, pues de los españoles que mandan no se puede esperar mucho.

Dentro de ese proyecto gastronómico de engullir a Guinea Ecuatorial, el pasado viernes, día 11, se inauguró la Semana de la Francofonía. En el acto de apertura participaron  la Directora de ICEF, Ivanne Girard, Cirilo Tobías Ncogo, representante de la francofonía y otros. Se dice, que la iniciativa partió de los profesores franceses afincados en la ex colonia española. Nosotros creemos que fueron «inducidos», como otros lo fueron a la huelga de hambre. ¡Salud, dinero y amor!

Unos tiran para el Estado-Nación y otros para sí. Los franceses hacen negocios, claro que sí, pero con el ojo también en el Estado. Otros solo tiene puesto los ojos en la talega, en el bolsillo. Nos han contado con pelos y señales un cuento, un bonito cuento.

A uno le proponen realizar un acto heroico; pero  a los pocos días utilizan ese acto para decirle al «mandamás»: ¡Oye que esto puede ir a más y acabar contigo! ¡Hay que pararlo! Avión de Iberia a punto destino Madrid y de allí a tierras independentistas. La puesta en marcha y paro de la acción ha tenido un costo. El paganini, en esta ocasión se sabe quién es. ¿Quién o quiénes han sido los receptores del convoluto?

Se cumplirán las promesas de gratificar con una fundación o un buen puesto de trabajo al sujeto activo de la operación. Veremos. Nosotros creemos que ya no les queda tiempo.

Hablaremos más del asunto.

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