Francia
espacioseuropeos.com (30/5/2011)
Mientras en España las protestas continúan -en Madrid y Barcelona siguen las acampadas- miles de jóvenes en París (Francia) se concentraron ayer en la Plaza de la Bastilla para protestar, siguiendo el modelo de los «indignados españoles». Los eslóganes son los mismos que en España, contra «el desempleo», «la precariedad», «la corrupción» y la «precariedad de la democracia».
De acuerdo con la información distribuida por la agencia AFP, los manifestantes exhibieron una gran pancarta con el eslogan «Democracia real ya», que colocaron encima de las escaleras de la Ópera Bastilla, y otra en la plaza con el mensaje «París despierta». Otras pancartas hacían alusión al Mayo del 68. También ha habido concentraciones de jóvenes en otras localidades francesas, como Bayona, donde fueron desalojados por las fuerzas de seguridad por «perturbar el orden público».
En Paris, de madrugada, la policía francesa ha desalojado a los concentrados en la Plaza de la Bastilla.
En Madrid, Atenas y ahora París, miles de jóvenes protestan pidiendo una «democracia real ya», y «democracia auténtica». No son pocos los analistas que piensa que estos movimientos pueden convertirse en una ‘Primavera europea’.
Los acampados en Madrid han decidido continuar la protesta como mínimo hasta el jueves. A los grito s de «¡Basta ya!», «No nos callarán» y «Cobrar 600 euros al mes es terrorismo», miles de jóvenes y no tan jóvenes, permanecen concentrados a estas horas en la Puerta del Sol de Madrid.
Pero, la protesta se extiende más allá de Europa. En China, donde de momento las posibilidades de manifestarse son harto complicadas, varios ciudadanos han actuado en solitario protestando por derribos, expropiaciones y otras formas legales de arrebatarles sus viviendas o terrenos. De hecho, se han producido algunos suicidios públicos -quemarse a lo bonzo-; en la localidad de Zhengzhou (este de China), una mujer de 45 años resultó muerta al interponerse ante una excavadora y una propiedad suya, que las autoridades habían ordenado derribar. En otra localidad, un hombre afectado por un desahucio hizo explosionar su coche contra un colegio.
N. de la R.
La fotografía es propiedad del diario El Universal.