Madrid (España)
espacioseuropeos.com (23/7/2011)
Eran poco más de las 21 horas cuando las «columnas» de «indignados» procedentes de toda España se encontraban en la Puerta del Sol de Madrid. Los concentrados, tras muchos kilómetros de marcha -los de provincias-, se unían a los «indignados» procedentes de varias localidades de la Comunidad de Madrid, para reponer fuerzas con una cena, que se habían encargo de preparar la comisión correspondiente, y experiencias de la marcha.
Las viandas no han faltado, pues a través de las redes sociales se ha solicitado ayuda, en previsión de que los platos no estuvieran llenos. El éxito ha sido total. No ha faltado de nada.
Los «indignados» reunidos en Madrid, procedían de Galicia, Bilbao, Barcelona, Valencia, Murcia, Málaga y Extremadura, siete marchas que, junto con la que se ha llevado a cabo en las Islas Canarias, la ‘Marcha Popular Indignada’, han integrado el núcleo de este retorno a la calle de los «indignados» españoles. Algunas de las marchan comenzaron hace más de un mes, y a sus componentes se les nota el cansancio, aunque el animo no decae.
Las siete marchas atravesaron la capital de España sin ningún incidente digno de reseñar. Es más, mientras se dirigían a la Puerta del Sol, caminaban por las calles, cortando el tráfico de vehículos, sin que ni la Policía Local y la Nacional tuviese que intervenir. La mayoría de los ciudadanos han visto con buenos ojos la marcha y no han sido pocos los que a la invitación de «A ti que estás mirando, también te están robando», se han unido a ellos.
Los lemas más coreados durante las marchas han sido: «No es una crisis, es el sistema», «Que no, que no, que no nos representan» y «Cueste lo cueste, de Norte a Sur de Este a Oeste, la lucha sigue». El grito de bienvenida, ya en la Puerta del Sol, ha sido «Bienvenidos, hoy Sol vuelve a brillar más fuerte que nunca».
Tras la cena, un breve descanso, y comienza la Asamblea General. Mañana será otro día, pero la acampada de la Puerta del Sol recobra nuevos ímpetus, mientras el Gobierno de España proyecta dar un nuevo golpe a los ciudadanos con la retirad de la «acción popular» a través de nuevas leyes, y «regala» más de 3.000 millones de euros de todos los españoles a la Caja del Mediterráneo para después entregarla limpia de polvo y paja a un «gran banco».