España
G. T. (2/12/2011)
«Por la crisis, en España, han cerrado 51 empresas de más de mil trabajadores y 350.000 de autónomos», algo que demuestra cómo las más perjudicadas son las empresas de un perfil más modesto, en palabras de Lorenzo Amor, presidente de ATA, la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos. Durante un desayuno informativo del Club Internacional de Prensa, en Madrid, manifestó también que los autónomos aspiran a ser interlocutores en los órganos del diálogo social.
El único sector que entre los autónomos ha crecido es el de los periodistas, probablemente por el incremento del paro en la profesión y la precariedad en el empleo.
Dio a conocer igualmente que las Administraciones públicas del periodo de gobierno socialista dejan a deber unos 4 millones de facturas a proveedores y autónomos en general. Éstos, además, han soportado la carga de más de 1.900 millones de euros, adelantados por el IVA de facturas que no han cobrado.
Lorenzo Amor subraya que el Partido Popular, durante la campaña electoral, ha mostrado un programa ambicioso para los autónomos. «La música -precisa- ha sonado bien; ahora hay que poner la letra». Confía en un próximo encuentro con Mariano Rajoy.
ATA inicia su andadura, el año 1995, en Córdoba y fue extendiéndose por Andalucía, Extremadura y otras regiones hasta lograr alcance nacional en el 2000. Elegido como presidente, por primera vez en 2004, Lorenzo Amor acaba de ser reelegido por cinco años más. Preguntado, en nombre de espacioseuropeos sobre su extracción profesional, resumió: <<Yo soy de esas personas que han tenido muchas empresas y han fracasado algunas veces. He sido agente comercial y he vendido, a domicilio, filtros, libros, muñecas de cerámica, etcétera. Creé «Tu boda» y perdí dos millones de pesetas; me metí, asociado con otros, en un «pub», tuve una tienda en Córdoba, trabajé con cadenas de tiendas; importé artículos de Asia y he sido consultor. Hoy dedico el cien por cien de mi trabajo a ATA>>.
Experiencia, evidentemente, no le falta. Y, desde luego, se explica con toda claridad. Factores necesarios para batallar al frente de un sector en el que la devastación viene haciendo auténticos estragos.