Fábrica de dinero (Dibujo de Economía en una lección)
Fábrica de dinero (Dibujo de Economía en una lección)

Economía
Manuel Funes Robert (6/6/2012)
(El invento del papel moneda sin respaldo en Fausto)
Ciento treinta años antes de que Keynes publicara su TEORIA GENERAL DEL EMPLEO, DINERO E INTERES, Johann Wolfang von Goethe adelanta en su inmortal Fausto el milagro de la creación de dinero sin respaldo. En su famoso Fausto, Goethe lanza un relato histórico que es un aviso para la historia. El viejo sabio protagonista de la inmortal obra ha conocido a un personaje que se llama Mefistófeles pero que es el mismísimo diablo. Fausto vive en un reino cuyo emperador se encuentra agobiado por la pobreza y para disimular y ganar credibilidad ante su corte organiza una gran fiesta a la que invita a Fausto y a su amigo. Y éste, nada más ser presentado al emperador le anuncia «tendrás el dinero que necesitas y te sobrará para comprarle joyas a tu querida». Días después  aparece el ministro de Hacienda y dice: «Señor, pagadas están todas las deudas y rotas las manos de los usureros»; aparece el ministro del ejercito: «Señor, reenganchase todo el ejército y con nuevos bríos se sienten tus soldados».

El emperador pregunta ¿quien ha hecho el milagro? Le responden: «Tu mismo, disfrazado estabas del gran Pan y se te acercó de Hacienda proponiéndote  el mayor placer de la fiesta salvando a tu pueblo con un par de plumazos. Firmaste y aquella noche cientos de expertos calígrafos imitaron tu firma en documentos que al día siguiente entraron en circulación» . Y pregunta el emperador,  «¿qué decía este documento?». Decía: «A lo que responden sepa todo el que viera esta cedulilla que vale por 5000 coronas en prenda de las cuales le asigno los incontables tesoros que yacen en los palacios imperiales». Responde el emperador: «¡pero eso es falso!». «Pues es imposible retirarlos ya de la circulación», le responden sus ministros.«Mira a tu pueblo, antes en desanimo y ahora corre el vino en las bodegas al grito de viva el emperador». El emperador acepta los hechos en vista de su éxito.

Esta simulación se hace en los años 30 del siglo XIX, un siglo antes de que el mundo reprodujera el documento quedando aceptado para siempre el papel moneda sin respaldo. Desde el mundo de la filosofía ya había nacido la idea que había de revolucionar al mundo y si antes se admitía el dinero por el valor que se atribuía al oro ahora todos lo admiten simplemente porque lo admiten todos.

Este paso de gigante administrado por los principios keynesianos. La desgracia actual consiste en la resistencia hacia ese prodigio por parte de las autoridades de Bruselas (no es el caso de la Reserva Federal o del Banco de Inglaterra) y obsesionarse con buscar causas a la crisis que no están en el entorno de la sociedad sino en el mundo de la doctrina que no acaba de creerse que lo que sirve para todo no cuesta nada, y nazca de la nada haciéndonos vivir la crisis más grave junto al remedio más sencillo que es la rotativa  de billetes, con capacidad por si sola de acabar con la deuda soberana de todos los países miembros de la Unión Monetaria.

Demasiado sencillo.