Siria/ONU
espacioseuropeos (9/10/2013)Un niño siriro en un campamento de ACNUR
Ban Ki-moon, secretario general de la ONU, en una carta dirigida al Consejo de Seguridad, ha propuesto mandar una misión conjunta (expertos de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas, OIAC) con el mandato de “censar y destruir” todo el arsenal químico sirio. La misión estará en el país hasta junio del 2014.

Actualmente se encuentran en Siria una veintena de expertos tratando de desmantelar las armas químicas que el régimen de Bashar Al Assad tiene. Los técnicos cuentan con la aprobación del régimen sirio y actúan de acuerdo con el mandato de fecha 27 de septiembre.

Está previsto que antes del 1 de noviembre estén destruidas todas las plantas de producción de armas químicas, y después los técnicos de la ONU procederán a eliminar mil toneladas de productos tóxicos que se encuentran en 40 depósitos ubicados en lugares dispersos.0

Queda claro que la inflexible posición de Rusia y China, aparte de los movimientos de protesta en Estados Unidos y otros países, ha contribuido a que Barack Obama abandone –al menos de momento- su proyecto de atacar Siria. Finalmente, el acuerdo entre Rusia y Estados Unidos, y la rapidez con que la OINU ha actuado para eliminar las armas químicas ha supuesto optar por la vía diplomática. Por supuesto, el malestar en el complejo armamentístico estadounidense es tremendo, como lo es en la Francia de Hollande, que se ha tenido que guardar sus ardores guerreros.

Francia y Arabia Saudí, que estaban dispuestas a  “reforzar a la Coalición Nacional Siria  (CNS) y al Ejército Siro Libre, en lo que se refiere a aspectos “militares, humanitarios y políticos”, se han visto obligadas a tener que apoyar la solución diplomática.

La actual solucón no ha terminado con los enfrentamientos entre el régimen y los llamados rebeldes sirios. Por otro lado, el conflicto sirio ha provocado una hecatombre entre la población, ya que, según la ONU, millones de personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares, cuando no el país. Aproximadamente tres millones de sirios han huido de los horrores de la guerra hacía los países fronterizos e incluso a la UE. Como consecuencia de la guerra y de este éxodo, los problemas sanitarios, de alimentación y de alojamiento se han convertido en una auténtica crisis humanitaria.