Israelsrael/Palestina
espacioseuropeos (18/7/2014)
“No puede haber una solución militar a este conflicto”. Las palabras del secretario general de las Naciones Unidas Ban Ki-moon resonaron en el Palacio de Vidrio pocas horas después de la invasión de Gaza por parte de las tropas israelíes. La operación militar ya causó las primeras víctimas civiles palestinas entre las que hay un recién nacido, elevando el número de muertos a 258 y los heridos a 1.920, según fuentes médicas en el terreno. Las últimas víctimas son cuatro integrantes de la misma familia, muertas en Khan Yunis, en el sur de la Franja. Otras dos murieron en Beit Hanun, en el norte, siete en Shejaiyeh (este), y cuatro –entre ellos el recién nacido– en Rafah, el paso fronterizo con Egipto. En las primeras horas del ataque por tierra también encontró la muerte un soldado israelí.

En once días de ofensiva, se atribuye a Hamás el lanzamiento de 1.150 cohetes, 311 de los cuales fueron interceptados pro el sistema de defensa antimisiles ‘Iron Dome’ (literalmente ‘Cúpula de Hierro’). En un comunicado, el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu justificó la invasión con “la negativa de Hamás a aceptar el plan egipcio de un cese del fuego y el continuado lanzamiento de cohetes contra Israel”. Según el primer ministro, el objetivo de la ofensiva es “infligir un golpe significativo a las infraestructuras de Hamás”.

Por toda respuesta, el portavoz de Hamás en Gaza, Fawzi Barhoum, habló de “una etapa peligrosa, cuyas consecuencias son incalculables” y por la cual “Israel pagará un alto precio”. Según el jefe de Hamás en el exilio, Khaled Meshaal, el ataque por tierra “está destinado al fracaso”.

Desde Egipto, donde se reunió ayer con el presidente Abdel Fattah Al-Sissi, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) Mahmoud Abbas deploró el ataque, afirmando que “sólo producirá otro derramamiento de sangre y complicará los esfuerzos para poner fin a la agresión”.

Fuente: Agencia de Noticias MISNA.