España
espacioseuropeos (12/8/2014)
El sacerdote Miguel Pajares ha fallecido esta mañana en el Hospital Carlos III de Madrid. Desde que llegó a España, Pajare estaba siendo tratado en el Hospital Carlos III y desde el día 10 recibía el medicamento experimental ZMapp que había llegado a España procedente de Estados Unidos. Como es sabido, el sacerdote español fue evacuado por el gobierno español desde Monrovia, junto con la hermana Juliana, que dio negativo en las pruebas a las que fue sometida en España.
Al sacerdote no se le ha realizado la autopsia ya que el protocolo sanitario lo impide debido a la «alta carga viral de los fluidos corporales», según ha recogido EFE de fuentes hospitalarias. Debido a ese mismo protocolo, su cadáver va a ser incinerado.
El sacerdote George Combey, de nacionalidad gabonesa, compañero de Miguel Pajares, falleció días antes en el Hospital de San José de Monrovia (Liberia). A esta muerte hay que sumar la de la religiosa Chantal Pascaline, fallecida el pasado sábado, así como la de Patrick Nshamdze, director del mencionado centro hospitalario.
Miguel Pajares pertenecía a la Orden de San Juan de Dios y superior del hospital católico de San José de Monrovia había sido repatriado el pasado día 8 de este mes, desde Liberia a España en un avión medicalizado de la Fuerza Aérea Española.
Que se sepa, la muerte del religioso es la primera que se produce en Europa a causa del Ébola.
No es el momento de comentar e informar sobre las protestas y denuncias de sanitarios madrileños acerca del desmantelamiento del Hospital Carlos III (uno de los centros más prestigiosos del mundo en el tratamiento de enfermedades infecciosas) y la precipitación en habilitar ahora una planta para atender a Pajares, pero no por ello dejaremos de hacerlo.
Descanse en paz el padre Miguel Pajares, al que nunca dejaremos de agradecer su labor humanitaria a lo largo de su vida.