Hassana AaliaEspaña/Sáhara Occidental
Luis Portillo (2/2/2015)
El Ministerio del Interior ha denegado la petición de asilo político al activista saharaui Hassanma Aalia, de 27 años, condenado por un tribunal militar de Marruecos a cadena perpetua por su participación en el ‘Campamento de la Dignidad’ de El Aaiún (Gdeim Izik), que fue asaltado y desalojado por las fuerzas de seguridad marroquíes en 2010.-

La solicitud de asilo estaba avalada por diferentes organismos internacionales, entre ellos ACNUR (Agencia de la ONU para los Refugiados), mientras que otros organismos como Amnistía Internacional y Human Rights Watch han denunciado que el juicio en el que se le condenó  -y que se celebró sin su presencia- «ni fue justo, ni cumplía las garantías mínimas».

El Ministerio español comunicó la denegación de asilo político el pasado 19 de enero, dando un plazo de quince días a Aalia para que abandone España. Al parecer, las autoridades españolas reconocen que Aalia cumple los requisitos para que se le ofrezca protección, pero se le deniega con el argumento de que tiene un proceso judicial en Marruecos.

Varias entidades internacionales han criticado dicho proceso y han denunciado que las declaraciones inculpatorias se consiguieron bajo tortura. Según manifestación del propio Aalia (“soy activista pacífico desde los 17 años y he sido detenido y torturado en numerosas ocasiones”), la denegación está relacionada con los intereses económicos de España y Marruecos, «y esos intereses están por encima de los derechos humanos y del pueblo saharaui… Queda claro que no puedo volver, porque me espera la cadena perpetua y la tortura».

Desde mi modesta condición de ciudadano, estimo que la autoridad competente debería reconsiderar la negativa a la petición de asilo político de Hassana Aalia.

N. de la R.
El autor de este texto, Luis Portillo Pasqual del Riquelme, nos lo ha hecho llegar por si considerábamos interesante publicarlo, pues el diario ‘El País’ no lo hizo, aunque imaginamos el motivo.