Núñez Feijóo en Europa Press
Núñez Feijóo en Europa Press

España
José Luis Heras Celemín ( 21/4/2015)
Y Monago, el barón extremeño.
Presidentes de Comunidades Autónomas los dos. Por la mañana, Núñez Feijóo, el gallego sin complejos del PP que apunta a delfín de Mariano Rajoy en el desayuno informativo de Europa Press. Por la tarde José Antonio Monago, el barón extremeño, remando en la misma dirección, desde la tribuna del Club Siglo XXI.

“Me siento orgulloso de pertenecer a una formación política imperfecta y con errores” y “Estoy convencido de que merece la pena dedicar la vida a la política porque la política sirve a la gente”. 

Las frases, de hoy y de Núñez Feijóo, resumen la postura y la situación de quien parece abocado a convertirse en el sucesor de Rajoy al frente del PP.

Sin alardes ni complejos, el presidente de la Xunta de Galicia apareció con la intención de ver “qué puede decir este gallego en Madrid…, porque hay momentos que exigen un compromiso excepcional y porque, cuando todo parece estar a la contra es cuando hace falta gente que piense en grande y que crea en el sistema democrático y en este país”. 

Una vez en harina, usó la “Parábola del fariseo y el publicano” para advertir que hay dos posturas: La de “los fariseos que no creen en España y nos traen unos programas económicos irrealizables”. Y la de “los publicanos, que sabemos que la virtud de la democracia es corregir” y que procuran la limpieza asumiendo fallos y corrigiendo errores. Reformadores frente a mesías, “demagogos que prometen lo imposible y huyen de lo posible”.

Tras recordar a Adolfo Suárez, “hay que llevar a la vida política lo que es normal en la calle”, apuntó algunos datos: “Hay ansia de revancha de los que fueron democráticamente derrotados”. “La libertad sin ira molesta a los que quieren ira sin libertad y reniegan de la Transición”. “La mayor corrupción no es la crematística”, es la que altera el compromiso entre el elegido y los que le eligieron. En Galicia existe un “galleguismo reformista” donde “la herencia recibida y el ejemplo de los antecesores (Fernández Albor y Fraga) es un deber añadido”. Desde Galicia se puede hacer política de Estado desarrollando a la vez un galleguismo con compromisos y poniendo de relieve las diferencias “entre autonomías que se hacen más pequeñas y otras que se quieren ampliar”.

Después expuso las ideas: “Una democracia sólida no puede asentarse sobre partidos-personas, sino en partidos con ideología”. “Los hay que suplantan las ideas (y la ideología) con ocurrencias”. “El federalismo con unos delante y otros detrás es absurdo”. La postura ante el “AVE del Noroeste retrata. Ciudadanos quiere sustraer a Galicia y a Castilla una herramienta que moderniza” “Impedir que gobierne el PP es la fuerza principal que mueve a la izquierda. Algún día la izquierda tendrá que admitir lo mucho que le debe al PP”. Para gobernar, “de dos pasamos a cinco y aparece un panorama balcánico y volcánico”. La mayoría gobernante como fruto de intento de gobierno, no de desgobierno.

Acabó repitiendo la frase del principio “Me siento orgulloso de pertenecer a una formación política imperfecta y con errores”.

Con ello asumía sin complejos la situación del partido. Después, en respuesta a las preguntas (y repreguntas) que le hizo el director de Europa Press, García Vila, fue llenando algunos de los huecos del discurso:

¿Quiénes son los fariseos?: Podemos. Tienen soluciones para todo y no solucionan nada. Han perdido la transición española.

¿Ciudadanos?: Es un partido-persona. Como la UCD. C´s es una persona, no un partido.

¿Intereses contra el AVE a Galicia?: La suma del nacionalismo catalán, Podemos y Ciudadanos.

¿Rato?: Hay que saber qué se investiga y qué ha hecho. Deben actuar la Fiscalía, la Agencia Tributaria y la justicia. Tranquilidad porque el Gobierno tiene un compromiso de actuación, afecte a quien afecte.

¿Publicar los nombres de los que se acogieron a la amnistía fiscal?: Habrá que modificar la ley. Aunque Pedro Sánchez proponga que el Gobierno se aparte de la ley, es una medida torticera porque el Gobierno no puede hacerlo. Eso desgasta a la política, sin entrar en las amnistías fiscales de los socialistas”.

¿Errores en la financiación del PP?: “Es la primera vez que un Gobierno hace una ley que se ocupe de la financiación de los partidos políticos e incluye las transgresiones en el Código Penal”.

¿Resultados electoral?: “Si el bagaje es que no gobierne el PP, no lo entiendo”. “Si hay 6.000 coaliciones electorales en ayuntamientos y autonomías, va a afectar a nuestro desarrollo”. “Espero que los que nos votaron vuelvan a votarnos, si no ganará el peor PSOE de la historia”. “Votar no castiga a un partido, castiga a la sociedad”

¿Coaliciones?: “El discurso de Ciudadanos suena bien”

¿Renovación en la cúpula del PP?: “Creo que el PP va a ganar. Vamos a hacer las elecciones. Rajoy sabe que tiene que seguir con sus compromisos. Si el PSOE y Podemos tienen más votos que el PP, habrá que abrir un periodo de reflexión que debe considerar Rajoy

¿Sucederá a Rajoy?: “Yo estoy en política por la honorabilidad de Rajoy, desde siempre, a las duras y a las maduras. Estoy para ser útil a Galicia y a Rajoy”. 

Al acabar el acto, en el hotel Intercontinental, un runrún se movía por entre todos: “El delfín”.

Mientras, los candidatos presentes (Cristina Cifuentes, Esperanza Aguirre, el alcalde de A Coruña) hacían campaña, los secretarios de Estado (Ayllón, Beteta, Calvo Sotelo, Ybáñez Rubio…), que habían ido como segundos de sus ministros, salían a la calle, como otros (Romay Becaria, Barreiro, Celia Villalobos, Dancausa, Cobo…)

José Antonio Morago en el Club Siglo XXI
José Antonio Morago en el Club Siglo XXI

Por la tarde, en el Club Siglo XXI y presentado por Eduardo Zaplana, compareció el presidente extremeño José Antonio Monago. Asistió al acto el embajador portugués, pero no hubo acompañamiento del partido.

Habló de “Extremadura y del Silicon Valley extremeño: La dehesa, el Valle del Jerte, Mérida… Con la pasión que nace de la razón”, de un no nacionalista, centrista, extremeño y español. Presidente de un gobierno inestable (al que no daban ni seis meses de duración) que ha gobernado en minoría con la abstención de Izquierda Unida toda la legislatura, y que ha conseguido otra forma de gobernar en el Sur de España distinta a la socialista.

De cara a las elecciones autonómicas, reivindicó: El cambio de la mentalidad extremeña que ya no contempla el empleo público como único. La bajada de impuestos. La disminución de 10 puntos porcentuales de paro. La modificación de una política fiscal que tenía la menor renta per cápita de España y la mayor presión fiscal. El “pateo de todos los pueblos de Extremadura”. La conexión con los habitantes con los que –dijo – “yo puedo hablar de estas cosas en todos los pueblos de Extremadura sin que me tiren al pilón”. Y la conveniencia de que el Gobierno de la Nación “resuelva de una vez la unidad política del país”, para que con una financiación autonómica adecuada se garanticen servicios ciudadanos iguales en todo el territorio nacional.

A diferencia de Núñez Feijóo, Monago confesó “Yo no tengo ninguna aspiración (a la política nacional)”

Terminó atendiendo a algunos temas sugeridos por la prensa:
– El PP va a ganar las elecciones en Extremadura. Tras las elecciones, habrá pactos, pero no comprometidos, porque querrán ir limpios a las Elecciones Generales.

Fernández Vara no ayudará, no ayudó nunca y no quiere la lista más votada. Él y Pedro Sánchez pretenden un bloque de izquierdas sin explicar por qué la izquierda no va unida a las elecciones con una misma oferta.

– Debe acabarse el AVE a Extremadura y a Lisboa porque es parte de la red de transporte por ferrocarril europea. Se está haciendo por fases la obra, primero construyendo las plataformas en que asentar los raíles y teniendo en cuenta los radios de curvatura y las necesidades técnicas de la Alta Velocidad. Después vendrán la construcción de las catenarias, la electrificación y el resto. Cómo fecha de terminación, quiso esperar un periodo de 2 años.

Al acabar, mientras las cámaras de televisión conectaban con el telediario de la noche, una señora pidió la palabra y cerró el acto:

“Yo soy extremeña. Gracias. Y felicidades, paisano”