El rey Felipe VI, acompañado del ministro de Defensa, Pedro Morenés, con el nuevo rey saudí, Salman, en el funeral por la muerte de su hermano Abdalá. Archivo, foto Casa Real.
El rey Felipe VI, acompañado del ministro de Defensa, Pedro Morenés, con el nuevo rey saudí, Salman, en el funeral por la muerte de su hermano Abdalá. Archivo, foto Casa Real.

España/Arabia Saudí
espacioseuropeos (9/1/2016)
Marina Albiol, portavoz de Izquierda Unida en el Parlamento Europeo, y el eurodiputado Javier Couso han exigido la Unión Europea que “rompa de inmediato las relaciones con Arabia Saudí”, tras la ejecución de 47 personas, entre las que está la del  clérigo iraní Nimr Baqer al-Nimr, el 2 de este mes. Tanto Albio como Couso han reclamado también al Estado español que ponga fin “de una vez por todas” a su relación diplomática con Arabia Saudí. Asimismo, han acusado a la Casa Real de España, de “mantener durante décadas una amistad con una dictadura criminal que lidera el ránking de vulneración de los derechos humanos”.

Para IU, la “UE debe romper de inmediato todas sus relaciones con Arabia Saudí. Relaciones que mantiene en el marco del Acuerdo de Cooperación con los países del Golfo (…) de igual modo, el Estado español, debe romper también esas relaciones, especialmente el intercambio comercial que mantiene la Casa Real con la monarquía saudí”.

Javier Couso, que es vicepresidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo, cree además que “la cercanía casi filial de Juan Carlos y Felipe con los sátrapas saudíes ofende” y pone muy en duda “el alcance de los negocios en los que han mediado”. Por ejemplo, en lo que se refiere a la exportación de armas, con un volumen de ventas que se acerca a los mil millones de euros en la última década. Advierte el europarlamentario de IU, que esas relaciones “Vulneran todos los códigos éticos que pregonan tanto el Estado español como la Unión Europea y dejan en un muy mala situación a la Junta Interministerial que vela por el cumplimiento de la Posición Común y el código que conducta que debería guiar y determinar las exportaciones en materia de armas o material de doble uso”.

Por su parte, Albiol ha sostenido que las ejecuciones del sábado son “además de un crimen”, una “provocación que, en el inicio de un nuevo año, dispara la desestabilización de la región”. Una desestabilización, “a la que el reino saudí ha contribuido como actor principal”. Couso ha asegurado que “van en consonancia con la batalla por la supremacía de la región y tienen que ver con la financiación de grupos terroristas que buscan la caída del gobierno sirio”.

“Arabia Saudí está implicada y dirige el ataque militar a Yemen, en la represión militar de la oposición en Bahréin y los demás países del Golfo, así como en la difusión de la versión más extremista de la religión emparentada con el takfirismo que profesa la organización terrorista autodenominada como Estado Islámico”, ha alertado Javier Couso.

Por todo ello, los dos miembros de IU consideran que hay motivos suficientes para que se revisen los acuerdos que mantiene España con Arabia Saudí, “si se atienden a los teóricos planteamientos que pregona la UE y que, en teoría, deberían marcar su política exterior”. Entre ellos, han citado “la irresponsabilidad manifiesta en la región, la vulneración sistemática de los derechos humanos, las sospechas de tolerancia y financiación de grupos extremistas, el sistema político dictatorial y teocrático, la política de exclusión de la mujer o el racismo laboral”.

Menos palabras y más hechos, reclaman los dos eurodiputados a la Alta Representante de la UE para Política Exterior, Federica Mogherini, por cierto muy cercana a las tesis que mantiene Estados Unidos. Para Couso, la condena y la fuerte oposición de la jefa de la diplomacia europea ante las ejecuciones saudíes “no pasa de ser un mero ejercicio de retórica que contrasta con la dureza demostrada con otros países como Rusia o Venezuela”.