MorenesEspaña
espacioseuropeos (9/9/2016)
Desde que España entró en la modernidad, la venta de armas se reinició con un fuerte impulso. El neoliberalismo del PSOE y el PP así lo exige. Unos gobiernos han vendido menos, pero sin embargo “vendieron” las empresas españolas de armas a compañías extranjeras, sobre todo estadounidenses. El caso más claro fue la venta de Santa Bárbara a General Dynamics.

Veamos: en 2007 España vendió armas por valor de 933 millones de euros; en 2009, 1.347; la cifra se eleva en 20111 a 2.481, para pasar a 2013 a 3.908. Todo parece indicar que este año superará a todos.

Llama la atención el incremento de la facturación española por ese negocio desde que Pedro Morenés accede al Ministerio de Defensa. También nos llama la atención que fuera José Luis Rodríguez Zapatero, el que se volcara en la compra a Estados Unidos 24 misiles “Tomahawk” por valor de 72 millones de dólares. Desconocemos hasta ahora dónde se “ubicaron” esos tremendos misiles “Tomahawk” de largo alcance, o si esa compra fue una parte de la contribución de España a la guerra desatada contra Irak por el inminente peligro de las “armas de destrucción masiva” que poseía Sadam Hussein. Armas que, como todo el mundo sabe –menos Aznar– nunca existieron.

Los países que más nos compran son Alemania, Reino Unido, Francia e Italia dentro de la OTA; fuera de la organización atlántica, el primer lugar lo ocupa Arabia Saudí. En la actualidad, nuestro país ocupa el séptimo lugar en la compra de armas.

Es quizás por la rentabilidad de ese negocio, por el que nos ocupamos –igual que el resto de países- por tratar de “apagar” los conflictos que existen, sobre todo en Siria e Irak, por no hacer la lista exhaustiva.