Salem.
Salem.

Internacional
espacioseuropeos (19/9/2016)
La tragedia del Yemen comenzó en marzo de 2105, cuando Arabia Saudí lanzó una ofensiva militar contra el pueblo yemení sin declaración de guerra y sin consentimiento de la ONU. El objetivo saudí era el movimiento popular Ansarolá, y de paso restaurar en el poder al   expresidente Abdu Rabu Mansur Hadi, que había huido del país. Mansur Hadi es un aliado de Riad y de Estados Unidos.

La ofensiva saudí, con el visto bueno de Estados Unidos, ha dejado cerca de 40.000 víctimas, entre muertos y heridos. Y muchísimas más que se han visto obligadas a abandonar el país.

Hospitales, mercados, colegios y mezquitas son blancos preferidos de la aviación de la coalición que lidera Arabia Saudí. Pero eso no es noticia. Y ya se sabe lo que no sale en la prensa no existe.

Pocas, muy pocas, son las noticias sobre lo que acontece en Yemen que aparecen en los medios de comunicación occidentales. Y cuando se publica alguna, no suele contar la tragedia del pueblo yemení, ni las consecuencias de los continuos bombardeos que padecen.

Por si los que bombardean o les mandan hacerlo no lo saben, Yemen es uno de los centros de la civilización de Oriente Próximo.

Ha sido una fotografía, una tremenda fotografía –hecha por Abduljabar Zeyad, fotógrafo de la agencia Reuters- la que ha conmovido a un sector de la población. El instinto del fotógrafo captó al pequeño Salem –un pequeño yemení- en una localidad donde no hay alimentos, medicinas, electricidad y casi falta el agua.

La fotografía de Salem (un esqueleto viviente) nos recuerda a otro pequeño, éste sirio, que murió cuando en compañía de sus padres y hermanos trataban de huir del infierno que han creado grandes potencias por el mero hecho de anexionarse sus riquezas petrolíferas o por motivos religiosos o geoestratégicos. Nos referimos a Ailam.

La imagen la captó el periodista de Reuters en un hospital, mientras su madre permanecía a su lado ahogada en lágrimas, impotente de ver como su vida se le escapa.

Mientras la fotografía de Salem da la vuelta al mundo, los estrategas de la muerte elaboran otras salidas de sus mortíferas aeronaves, con objetivos certeros y concretos, que jóvenes saudíes, qataríes y estadounidenses, cumplirán a rajatabla. ¡Obediencia debida!