España
Espacios Europeos (2/4/2017)
El Ministerio de Defensa deberá acometer pagos por importe de 21.000 millones de euros hasta el año 2030. Esos pagos son, lógicamente, a la industria de armamento por los Programas Especiales de Armamento (PEAs), según información facilitada por el Ministerio de Defensa. Esos datos fueron facilitados en la comparecencia del secretario de Estado, Agustín Conde, en la
Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados.
Estos pagos se refieren, principalmente, a Programas Especiales de Armamento, entre los que figuran los aviones de combate Eurofighter, el avión de transporte A400M, los carros de combate Leopard, helicópteros de ataque Tigre, etc. En la actualidad hay once programas especiales en curso y otros doce finalizados, pero con pagos pendientes.
El secretario de Estado de Defensa, Agustín Conde, aseguró en su comparecencia en la Comisión de defensa, que en el presupuesto de este año se incluirá el pago de 1.824 millones de euros a la industria fabricante de armamento, en concepto de facturas pendientes de 2016 y 2017.
De esos 1.824 millones, 635 irán al Eurofighter; 388 al A-400M; 281 al helicóptero NH-90; 200 al Pizarro: 96 a la fragata F-100; 76 al helicóptero Tigre; y 40 millones para el misil Spike.
Muchas de las cifras que aportó Conde corresponden a facturas pendientes y compromisos de pago adquiridos. El proceso de modernización iniciado en los años 90 supone entre facturas y compromisos de pago 30.075 millones de euros. Un cifra que parece muy alta, pero que llegó a ser ostensiblemente superior, pues antes de la renegociación que llevó a cabo el ministerio de Defensa en tiempos de Pedro Morenés llegó a estar situada en los 37.000 millones de euros (año 2011).
En línea con lo que expuso la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, en la Comisión de Defensa del pasado 20 de diciembre, el Secretario de Estado reiteró que “existe un firme compromiso del Ministerio de Defensa para atender en 2017 los pagos de los Programas Especiales de Armamento que no pudieron satisfacerse en 2016, como consecuencia de la sentencia del Tribunal Constitucional, cuyo importe asciende a 716,8 millones de euros”.
Según la nota de Defensa, los Programas Especiales de Armamento nacieron en la década de los años noventa “para modernizar y dotar a las Fuerzas Armadas de los sistemas de armas necesarios para desarrollar eficazmente las misiones nacionales e internacionales encomendadas, lo que permitió generar capacidades industriales y tecnológicas de las que España carecía y potenció el sector de la industria de defensa nacional”.
Desde que María Dolores de Cospedal llegó a Defensa se han abonado 8.000 millones de euros, resta por pagar, nada más y nada menos, que la cantidad los 21.000 millones.