Rajoy y Bárcenas.

España
Espacios Europeos (25/1/2018)
Interesante, sobre todo por lo que parece presagiar en el PP, La Voz de Iñaki (Gabilondo) de hoy en la Cadena SER, que hemos estimado conveniente recoger, aunque a nuestro entender sería mejor que se presentara a las elecciones, así la Justicia, los “arrepentidos”  empresarios y políticos y algunos medios de comunicación, podrían seguir aportando más información sobre las tropelías cometidas.  

He aquí el texto de Iñaki Gabilondo.

“Por fuerte que sea la tradición de docilidad del PP, espero que alguien se atreva a convencerle de que debe hacerse a un lado.

A la misma hora en la que ante el juez el ex secretario general Ricardo Costa lo contaba todo sobre la financiación ilegal del PP en Valencia, en un testimonio sangrante y demoledor, Rajoy, que debió haber dimitido hace tiempo por este y otros asuntos similares, anunciaba en Onda Cero su intención de repetir como candidato a la Presidencia. Lo contó en el marco de una conversación en la que era imposible discernir si hablaba un inconsciente o un cínico.

Rajoy solo asume su responsabilidad en las noticias económicas positivas, lo que va mal no es de su incumbencia. Ni siquiera le incómoda el hecho de que bajo su mandato se haya producido la mayor fractura de la historia de nuestra democracia. Si Rajoy hubiera sido el capitán del Titanic no hubiera aceptado ningún reproche porque el destrozo no lo había provocado él sino un iceberg.

Rajoy quiere repetir. Por fuerte que sea la tradición de docilidad del PP, espero que alguien se atreva a convencerle de que debe hacerse a un lado. Lo necesita el propio partido porque la parálisis política progresiva de su líder está deteriorando a toda la organización, que degenera a su imagen y semejanza. Y lo necesita sobre todo España, que es un país al que Rajoy ha cortado las alas y que ya no sabe soñar y solo se mira el ombligo. Un país que se ha convertido en una hucha, que solo vale por lo que quepa en ella y en el que nadie vale si no tiene hucha. Un país al que Rajoy no propondrá nunca más proyecto que un ahora mismo conformista y sin el menor aliento transformador para ir a la pata coja mientras el mundo vuela. Rajoy quiere repetir y aún se atreve a alardear de sentido común”.