Andalucía (España)
Alejandra Durrell (18/10/2014)
La presidenta no electa de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, apoya con fervor inusitado a EEUU para que utilice “sus” bases militares (las estadounidenses) de Rota y Morón de la Frontera (Andalucía). Así se lo expresó al embajador de Estados Unidos en España, James Costos, durante la larga entrevista que mantuvieron esta semana en los Reales Alcázares de Sevilla, de momento españoles.
De acuerdo con las declaraciones del consejero de la Presidencia, Manuel Jiménez Barrios, después de la entrevista que mantuvieron Díaz y Costos, la presidenta andaluza mostró «muchísima insistencia» en la necesidad de “mantener la tradicional» distribución de riqueza y empleo que suponen las dos bases estadounidenses en la comunidad autónoma: Rota en Cádiz y la de Morón de la Frontera en Sevilla. Curiosamente, en esas instalaciones militares estadounidenses hay en ciernes un ERE -¡Dios que peligro!- que podría afectar a unos 60 trabajadores españoles.
La petición de Susana Díaz de que se aumente el tráfico y utilización de las dos bases, olvidando eso de la “soberanía nacional”, se va a plasmar en la inminente presencia de miles de militares estadounidenses encuadrados en el escudo antimisiles en Rota, algo que aprobó su partido, el PSOE, en los últimos meses de la presidencia de José Luís Rodríguez Zapatero, sin consultar a los españoles ni tampoco al Congreso de los Diputados.
El embajador estadounidense, James Costos, respondió de forma exquisita y diplomática, con un «tomo nota”.
Recuerdo que este embajador se permitió opinar -sin que nadie le llamara a consultas ni pidiera disculpas ni tampoco la Administración Obama– sobre el “conflicto catalán”, afirmando que “si Cataluña se independinzara los empresarios deberán adaptarse a la nueva situación”.
Costos se encontraba en Sevilla, entre otras cosas, visitando los Reales Alcázares de Sevilla, donde se ruedan algunos episodios de la serie ‘Juego de tronos’. Allí se entrevistó con el alcalde de Sevilla y poco después con Susana Díaz. Los dos políticos con mando en plaza, se mostraron, como es habitual ante la visita de un delegado del Emperador, un tanto genuflexos.
Desde esas bases partirán en breve tropas estadounidenses para combatir al virus del Ébola en África, pero también desde allí parten muchos de los aviones que lanzan su mortífera carga sobre los radicales milicianos del Ejército Islámico que, por desgracia, tienen sus efectos colaterales.