Guinea Ecuatorial
Abaha (30/10/2008)
Teodoro Obiang Nguema se ha sentido generoso con Fidel Castro y le ha regalado dos millones de euros para ayudar a paliar los daños ocasionados por el paso de los huracanes Gustav e Ike.

De acuerdo con la nota del Consejo de Ministros de la República de Guinea Ecuatorial, el Gobierno «ha considerado pertinente dicha propuesta, por la amistad sincera y fructífera con el país caribeño que siempre estuvo al lado de Guinea Ecuatorial en todos los momentos así como el gran nivel y espíritu de superación que le sitúa como el país con mayor número de asistentes profesionales y con el rendimiento efectivo en Guinea Ecuatorial». En consecuencia, el Gobierno guineano ha concedido una ayuda económica de 2.000.000 de Euros a Cuba.

También Haití se ha visto beneficiado por la generosidad del dictador, que teniendo en cuenta la «colonia estudiantil ecuatoguineana en dicho país, muchos de los cuales han sido afectados por esas catástrofes, el Gobierno ha estimado otra ayuda humanitaria de 300.000 Euros a la República de Haití».

En ese consejo de ministros se ¿analizó? la crisis económica mundial llegando a la conclusión de que Guinea «podría sufrir un serio revés; por lo que se hace cada vez más acuciante la necesidad de que el Gobierno adopte un vasto programa de diversificación de la economía para generar nuevas fuentes de crecimiento y de ingresos, desarrollando la Agricultura, la Ganadería, el Turismo, Pesca, los servicios financieros, etc. Para disminuir nuestra dependencia del petróleo».

Lo cierto es que suena a chiste. Guinea es en la actualidad un país incapaz de sembrar ni una simple patata, ni conseguir que nazca un pollo, ni que engorde un marrano (cerdo). Todos los productos agrícolas que se consumen en el país proceden en su mayor parte de Camerún. Hasta el cacao de Malabo se ha perdido…

¿De qué narices entonces hablan de diversificar la economía? A no ser que se refieran a la economía que se deriva de la extorsión, la corrupción, el expolio, el terrorismo de Estado.

A pesar de la situación calamitosa de la población, el «clan de Obiang» sigue erre que erre con sus mismas preocupaciones, que se basan en terminar con la oposición. Con sus amigos de España, que le han diseñado la «operación», tratan de conseguir que todos los ¿opositores? regresen a casa, o sea a Guinea Ecuatorial. Y los que se resisten, ya se sabe, palo y palo.

Mientras Obiang Nguema no ceja en su obsesión de intentar que Severo Moto le sea entregado, el «Pacto Diabólico» continúa su marcha. Se espera que a finales de este año, no quedará casi ningún ¿opositor? originario de Mongomo (lugar donde nació el presidente ecuatoguineano) fuera de Guinea.

El último, que sepamos, que ha regresado a casa ha sido el ex teniente coronel Félix Mbá Nchama, que se encontraba refugiado en Benín desde hace varios años. Mbá Nchama rompió con Obiang a mediados de1983. Huyó porque temía por su vida, ya que el dictador le había acusado de estar involucrado en otro supuesto golpe de Estado, en este caso en compañía del sargento Micó, al que España entregó sumisamente a Obiang Nguema, después de que se refugiara en la sede de la delegación diplomática en Malabo. Los artífices de tamaña inmoralidad e ilegalidad fueron el entonces presidente del Gobierno español Felipe González y su ministro de Asuntos Exteriores, Fernando Morán.

En el mes de agosto del año 1979, Félix Mbá Nchama lideró las fuerzas militares que se rebelaron contra el presidente Francisco Macías; era por aquellos días el militar de más prestigio en Guinea Ecuatorial, fue ministro de Interior tras el llamado «Golpe de Libertad». Poco más tarde, a finales de 1981, Obiang desconfía de él y le nombra embajador en Etiopía.

Durante los primeros años de su exilio en Benín, la figura de Mbá Nchama fue un símbolo y una esperanza para ciertos sectores de la oposición guineana, pero la larga estancia fuera de la Patria, necesidades personales u otros motivos, le fueron relajando en su actividad opositora. Las ayudas de algunos empresarios españoles, amparados por la «Luna» no fueron más que un «sacacuartos» que le iban permitiendo malvivir. Hasta que ha sucedido lo previsto. Nosotros jamás, dimos credibilidad a sus aspiraciones…

Dentro del afán depredador del régimen-sistema, aquí tenemos un ejemplo de la permanente obs

José Olo Obono, ex fiscal general de Teodoro Obiang Nguema.

esión del dictador y sus secuaces. La revista «La Gaceta de Guinea Ecuatorial«, ha entrevistado en su último número a José Oló Obono, Fiscal General de la República. Alfonso Biahute Chevá ha sido el encargado de acometer ese trabajo. La primera pregunta del periodista es: «¿Todavía sigue en curso el proceso judicial contra todos los implicados en la trama golpista de marzo – 2004»?

Oló Obono comenta que «pese a la conclusión del último juicio contra Simon Francis Mann, Mohamed Salam y otros ecuatoguineanos aún siguen en pie las investigaciones para alcanzar a un juicio oral y público«.

«El objetivo» para Oló –por tanto para Obiang Nguema– es sentar en el banquillo de los acusados a todos los implicados en esta intentona golpista, sea a nivel interno (con miembros del PLAN A) o internacional, especialmente contra Ely Calil y Mark Tacher«.

Oló afirma que no pueden revelar «las identidades de las demás personas o personalidades involucradas, porque todavía existe secreto sumarial con relación a ellos. En todo caso, prosiguen las acciones judiciales. Perro sí, existe la certeza del «PLAN A».

Sin duda alguna, Severo Moto no podía estar fuera de la entrevista: Y José Oló contesta así: «Su demanda de extradición está actualmente en curso en España, pero el único impedimento en que tenemos se basa en que actualmente seguimos con el proceso del retiro de su condición de asilo político. Ésta es condición sine qua non para dar otro paso. Si no se le quita su condición de asilado [político] no puede ser extraditado de España a Guinea Ecuatorial».

¿Cuántas apariciones públicas ha hecho Obiang desde su supuesta muerte o enfermedad? ¿Cuántas audiencias ha concedido? ¿Se ha entrevistado con Francisco Hernando, «El Pocero»?

El Proyecto Marina D´Or no llegó a cuajar en Guinea Ecuatorial, pero a través de «El Pocero», sus socios aúlicos van a entrar en el negocio, aunque sea por la vía castellanomanchega y valenciana, que esta si que tiene fuerza y pelo…