Francia
espacioseuropeos.com (24/12/2011)
Casi once años después de que Francia reconociera de manera oficial el genocidio armenio, la Asamblea Nacional ha aprobado -el pasado jueves- un proyecto de ley que castiga su negación con penas de prisión de hasta un año y multas de hasta cuarenta y cinco mil euros.
La presión gubernamental turca, que alentó la protesta de miles de ciudadanos de esta nacionalidad, no ha impedido que prosperara la resolución impulsada por la diputada marsellesa Valéry Boyer, que ahora deberá pasar el trámite de su aprobación por el Senado.
Ankara ha cancelado las relaciones políticas bilaterales y ha anunciado duras represalias económicas.
En una nota de prensa, el Consejo Nacional Armenio de España, considera el «hecho como un avance histórico, que esperamos el nuevo gobierno de España continúe, en la línea de la Comunidad Europa cuyo Parlamento ya reconociera el genocidio armenio en 1987».
Hace unos días, el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, alertó a Francia sobre las graves consecuencias que tendría la aprobación de la ley que la Asamblea francesa ha aprobado, a la vez que pidió al presidente francés, Nicolas Sarkozy, frenar esa propuesta.
Hay que recordar que Francia reconoció en el año 2001 el genocidio armenio perpetrado entre 1915 y 1917, bajo el imperio otomano. Según el pueblo armenio, el genocidio turco dejó cerca de 1,5 millones de muertos.
Por su parte, Turquía siempre ha reconocido que, aproximadamente, medio millón de ciudadanos armenios murieron en el transcurso de esos años, pero fue a consecuencia de la primera guerra mundial.
Funcionarios diplomáticos turcos han «amenazado» a Francia de que existe la posibilidad de que ciudadanos de su país puedan tomar represalias contra productos franceses. En medio de esta disputa se sitúa la postura francesa -y Alemana- de oponerse a reconocer a Turquía como un país europeo.