Mi Columna
Eugenio Pordomingo (17/9/2006)
afirmó desde Cuba, donde se encuentra participando en la XIV Cumbre de los países No Alineados (NOAL), el Presidente de Bolivia Evo Morales, tras conocer la dimisión irrevocable de su ministro de Hidrocarburos Andrés Soliz Rada.
La noticia de la dimisión de Soliz Rada no por esperada ha dejado de sorprender. Lo ha hecho acompañado por todo su equipo de colaboradores en el ministerio. La prensa de Bolivia, de forma generalizada, ha visto así la dimisión: «Se fue el hombre fuerte de la nacionalización», aunque unos la aplauden y otros la ven como el inicio de un posible fracaso de la política del MAS y de Morales.
Andrés Soliz Rada ha renunciado un día después de que congelaran su resolución, que causó una importante crisis con el Gobierno brasileño de Lula y con la empresa brasileña Petrobras. Nadie duda que su dimisión se ha debido a que se ha sentido desautorizado.
La defensa férrea que hizo de los recursos naturales de Bolivia le ha causado serios enfrentamientos, además de tener que soportar las presiones de algunos países, entre ellos España.
Las relaciones de Soliz con el Vicepresidente Álvaro García Linera no han sido todo lo apacibles que pudiera parecer. Y así, con toda urgencia, Álvaro Linera firmo, en sustitución del Presidente Morales, el nombramiento de Carlos Villegas como nuevo ministro de Hidrocarburos.
España, Brasil y EE.UU., respiran de momento más tranquilas. Villegas es más «negociable», y caso de que no lo fuera suficientemente, siempre habrá otro sustituto.