Elecciones en Guinea EcuatorialGuinea Ecuatorial
Abaha (21/4/2013)
El pasado miércoles, día 17, el dictador Teodoro Obiang Nguema clausuró su campaña electoral en el estadio polideportivo de Malabo, donde recibió “honores” militares. Las elecciones “senatoriales, legislativas y municipales”, como denomina el gobierno de la dictadura a estos “comicios”, están convocadas para el próximo 26 de mayo

Obiang ha participado en dieciocho distritos en actos electorales con la misma cantinela propagandística, tratando de meter el miedo a los ciudadanos, animando e incitando a todos a espiar a sus vecinos pues deben estar alertas de posibles intentos de golpe de Estado, a la vez que afirmaba que la mayoría de los guineanos son “brujos”: “Me quieren sacar del país y no les voy a vender petróleo. Son pobres –aludiendo a España-, pero yo no les he hecho pobres”, afirmó, por ejemplo, en el mitin de Kogo.

Por su parte, ´Teodorín´, hijo del dictador, ha acusado al CPDS de ser un partido de “bandidos” y de querer desestabilizar el país.

En los distritos donde ha habido mítines de campaña, la presencia militar y policial ha sido abrumadora, además de paralizar el tráfico y cerrar escuelas, hospitales y oficinas estatales.

En el mitin que dio Obiang en Malabo, el último de estas elecciones, el gobierno ordenó cerrar escuelas, hospitales y centros sanitarios, mercados, así como todo tipo de oficinas estatales a fin de que todos los guineanos asistieran a escucharle. Y como es habitual todos los funcionarios están obligados a asistir.

Ningún partido político opositor al régimen guineano participa en estas elecciones –por llamarlas de alguna manera-, entre otras razones porque la dictadura les ha ilegalizado, o bien por la falta de garantías, tanto físicas como del proceso. A pesar de esa pantomima electoral, ni la Unión Europea ni Estados Unidos, que tantas pegas ponen a los resultados electorales de Venezuela, han hecho el más mínimo gesto de desacuerdo con la convocatoria de Obiang Nguema. Los medios de comunicación españoles permanecen, en la mayoría de los casos, insensibles, sordos, mudos y ciegos; o sea, cómplices por desconocimiento u omisión.

Otro tanto hay que decir del Congreso de los Diputados y Senado, así como de los parlamentos autonómicos y ayuntamientos tan sensibles en otros casos.

Nos llega el rumor de que Obiang Nguema, quizás preocupado por su suerte, ha mantenido un encuentro –o va a mantenerlo- con un periodista con la idea de que se conozca en un futuro –quizás una forma de presión a lo “Bárcenas”, con contabilidad de los sobres entregados-, los encuentros que ha tenido con políticos, empresarios, abogados, y “otros”.

Entre tanto, a columpiarse que es muy saludable.