Abaha (6/7/2008)
Como un presagio, la crónica de nuestro corresponsal en Guinea Ecuatorial, se titulaba ayer «El nerviosismo se adueña de la dictadura en Guinea Ecuatorial«. En efecto, fuentes oficiales del Gobierno de Guinea Ecuatorial dan cuenta de la dimisión del Primer Ministro, Ricardo Mangue Obama. La dimisión del Primer Ministro y de todo el Gabinete -de acuerdo con esas mismas fuentes- fue presentada al dictador Teodoro Obiang Nguema el viernes pasado.
Obiang aprovechó para criticar con dureza al Ejecutivo encabezado por Mangue Obama, calificándolo como «uno de los peores jamás creados».
Nada más presentar su dimisión, el ex ya Primer Ministro declaró solemnemente: «Por imperativo constitucional (…) he decidido presentar mi dimisión como primer ministro jefe del Gobierno y el de mi equipo gubernamental, con un espíritu cívico y el privilegio de haber servido al pueblo (…) bajo las directrices de su excelencia el presidente de la República».
Asimismo, Ricardo Mangue Obama lamentó «no haber podido alcanzar todos los deseos de su excelencia el presidente de la República» a la hora de conseguir «un país desarrollado y próspero».
El 14 de abril de este año, en una crónica («Ricardo Mangue Obama, Primer Ministro de Teodoro Obiang Nguema, encarcelado durante dos días por «mantener contactos» con Severo Moto«) mencionamos que el Primer Ministro había estado encarcelado durante, al menos, dos días por mantener contactos y negociaciones con el opositor Severo Moto. Una vez más, nos reiteramos en lo dicho y en sus consecuencias, que ahora parecen claras.
En ese artículo comentamos que el Primer Ministro «fue detenido, encarcelado e interrogado por iniciar contactos con Severo Moto de cara a cambios en Guinea en un futuro inmediato». También mencionamos que el «encarcelamiento se prolongó por espacio de dos días, en los cuales el primer ministro, como un preso cualquiera, fue sometido a interrogatorio, fue insultado y amenazado».
Como consecuencia de esos «contactos», el libanés, residente en Guinea Ecuatorial, Mohamed Salam, fue detenido y «recluido en dependencias policiales«. En la actualidad permanece en la prisión de Black Beach, habiendo sido desposeído de todos sus bienes por orden del hermano de Obiang Nguema, el general Armengol Ondó Nguema.
Sin quererlo, Obiang Nguema está precipitando la «Operación Navalcarnero». La tenaza contra la dictadura que asola al sufrido pueblo guineano, se va cerrando desde Camerún, Nigeria y Navalcarnero. Todos por separado, pero todos para uno, parece ser el lema…