España/Sáhara Occidental
espacioseuropeos.com (3/3/2011)
El responsable del área internacional de UPyD, Fernando Maura, ha denunciado y condenado la «salvaje represión» de que en los últimos días han sido objeto cientos de ciudadanos saharauis en las ciudades ocupadas por Marruecos de Dajla y El Aaiún y ha considerado «especialmente perversa y repugnante» la utilización de colonos marroquíes por parte de las autoridades de Marruecos en las agresiones.
Tras calificar algunas de las imágenes que han empezado a distribuirse en la red, a través de activistas saharauis, como «absolutamente espeluznantes», Maura asimismo ha señalado que el Gobierno de España «es uno de los principales culpables» de los hechos, «pues, al mostrar una pasividad y un sometimiento a Marruecos tan vergonzosos, cuando se desmanteló el campamento de Gdeim Yzik, ha permitido al Majzen envalentonarse cada vez más».
En esta misma línea, el responsable de política internacional de UPyD ha denunciado «el muro informativo impuesto por las autoridades marroquíes hacia todo lo que sucede en la zona desde hace meses» y ha reclamado al Gobierno de España «que se interese por unos sucesos que se enmarcan en un auténtico genocidio, del que este hecho es uno más, y deje de posicionarse al lado de los verdugos».
«Es una deshonra para la sociedad española que, después de haberse iniciado las revueltas en el mundo árabe el pasado mes de noviembre en Gdeim Yzik, ahora nos hayamos empeñado en mirar para otro lado y en olvidarnos de lo que sucede en un territorio que está ilegalmente ocupado por Marruecos a muy pocas decenas de kilómetros de España», añade Maura.
Asimismo recordó que «España sigue siendo, según Naciones Unidas, la Potencia Administradora ‘de iure’ del Sáhara Occidental y sigue teniendo responsabilidades jurídicas sobre sus habitantes», por lo que «por doloroso que nos resulte, los ciudadanos deben saber que es España es la mayor responsable de la impunidad con que Marruecos perpetra sus tropelías».
ACUERDO PESQUERO
Asimismo, Maura ha rechazado con rotundidad la reciente prórroga del acuerdo pesquero de la UE con Marruecos y ha condenado «el cobarde y falaz cinismo» con que, «faltando a la verdad», la ministra de Asuntos Exteriores Trinidad Jiménez la justificó hace unos días.
En esta misma línea, ha considerado altamente significativo que el recrudecimiento de la represión marroquí se haya producido tras la firma de dicho acuerdo y ha subrayado que la Unión Europea «debiera tomar clara nota de quién se beneficia y a quién se perjudica al tratar con dictadores».