Irán/Estados Unidos
espacioseuropeos.com (17/10/2011)
Mahmud Ahmadineyad, presidente de Irán, rechazó las acusaciones de la Administración Obama de haber planificado el asesinato del embajador de Arabia Saudí, Adel Al-Jubeir, en Washington. Ahmadineyad advirtió a Estados Unidos contra cualquier intento de confrontación por el presunto complot del que se le acusa, a la vez que señaló a Washington como instigador de una guerra en el Golfo Pérsico. Estas declaraciones las hizo el presidente iraní a la agencia de noticias IRNA.
«Las autoridades de Estados Unidos intentaron crear una nueva crisis, esta vez acusan al país de terrorismo, pero tienen que entender que el terrorismo es asunto de personas no cultas», declaró Ahmadineyad a la agencia de noticias iraní. La nación iraní es civilizada y no necesita recurrir a asesinatos, afirmó Ahmadineyad: «Los asesinatos son cosa de ustedes», en referencia a Washington.
Recordar que el día 13 de este mes, la Administración Obama informó a Ban ki-Moon, secretario general de la ONU, y a los miembros del Consejo de Seguridad del mismo organismo, acerca de un plan para asesinar al embajador saudí en Washington. El día anterior, la Fiscalía General de Estados Unidos, comunicó que «los servicios de inteligencia estadounidenses desmantelaron un plan terrorista contra Adel Al-Jubeir tramado por unos grupos dentro del Gobierno iraní», información que recoge la agencia de noticias RIA Novosti.
Por si fuera poco, el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, hizo pública la implicación en esa trama de oficiales de la Fuerza Quds, una unidad de élite de operaciones especiales de la Guardia Revolucionaria de Irán.
Hoy lunes, el canciller iraní, Ali Akbar Salehi, ha informado que su país está «dispuesto a examinar» esas acusaciones que hace Estados Unidos. «Estamos dispuestos a examinar esa cuestión con serenidad, aunque haya sido creada de manera artificial y le pedimos a Estados Unidos que nos suministre las informaciones sobre el caso», sostuvo el diplomático iraní, en declaraciones a la agencia oficial de su país.
¿Es cierto ese complot? o, quizás, es otro «arma de destrucción masiva», que más tarde se verán obligados a reconocer que estuvieron confundidos o engañados.
Irán, Siria… son las fichas de dominó que faltan para acabar la primera partida.