Sáhara Occidental
Ana Camacho (12/12/2011)cooperantes-secuestrados-en-los-campamentos-saharauis
Resultaba extraño (ya lo dije) que Al Aqmi, el Al Qaeda magrebí, hubiese reivindicado dos secuestros de europeos en Mali y hubiese en cambio perdido la oportunidad de lograr titulares en la prensa internacional atribuyéndose el rapto de los tres cooperantes en los campamentos del Frente POLISARIO en Tinduf, territorio de Argelia. Pero ahora, resulta todavía aún más extraño que, al negar Al Qaeda la autoría del asalto en Tinduf, en menos de 24 horas de este mentís, sea un grupo que nadie conoce el que reclame tener en su poder a estas tres víctimas, los españoles Ainhoa Fernández de Rincón, Enric Gonyalons y la italiana Rosella Urru.

Sus portavoces se lo comunicaron incluso por teléfono a la agencia France Press en Bamako (Mali), uno de los canales por donde más se ha suministrado información de «fuentes de la seguridad regional» que, pese al silencio de Al Qaeda, insistían en que los dos españoles y la italiana estaban en poder de este grupo islamista. Los supuestos secuestradores aseguraron ayer que forman parte de Jamat Tawhid Wal Jihad Fi Garbi Afriqqiya (algo así como, Movimiento Unido por la yihad en el Oeste de África), un grupo supuestamente escindido de Al Qaeda. Pero, explica la propia France Presse, no hubo forma de saber por qué están escindidos del Al Qaeda magrebí.

Lo único seguro es que este grupo nadie lo conoce porque se ha estrenado con el secuestro en Tinduf. Pero, pese a su éxito, no tenían prisa porque el mundo supiese que Al Qaeda del Magreb islámico (Al Aqmi) ya no tiene el monopolio de la lucha yihadista en el Sahel. ¿Les habrá dado la auténtica Al Qaeda un coscorrón a estos novatos para que se decidiesen a salir del anonimato? De no ser así hubiese subsistido la sospecha de que no decían la verdad cuando decían que nada sabían ni tenían que ver con lo ocurrido en Tinduf.

Si no fuese por la aparición del nuevo grupo, tras la desvinculación de Al Qaeda del golpe al Frente POLISARIO, habría habido que recurrir a otras hipótesis sobre la autoría de este secuestro al margen del terrorismo islamista. No hubiese quedado más remedio que investigar la posibilidad de la acción por libre de un grupo de traficantes deseosos de entrar hacer un suculento negocio vendiendo los tres chicos a Al Qaeda o, incluso, la tesis que corre de boca en boca entre los saharauis tanto del exilio como en los territorios invadidos por Marruecos: una turbia operación orquestada por los servicios secretos del majzén para desestabilizar al POLISARIO con vistas al 13 Congreso que el movimiento de liberación saharaui celebrará en los territorios del Sáhara Occidental bajo su control entre los próximos días 15 y 19.

La aparición de un nuevo grupo yihadista, en cambio, reforzará los argumentos con los que la propaganda de Marruecos y la de los partidarios de la anexión alauita del Sáhara Occidental han convertido el secuestro en Tinduf en una prueba de que el terrorismo de Al Qaeda está a punto de convertir el Sahel en un nuevo Afganistán y que el yihadismo ha penetrado los campos del Frente POLISARIO. Es su gran baza para intentar convencer a la comunidad internacional de que la lucha contra el terrorismo exige el sacrificio del derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui y pasar por alto las resoluciones de las Naciones Unidas.

N. de la R.
Este artículo se publica con la autorización de Ana Camacho, periodista, activista intelectual y física, de los derechos humanos, además de secretaria de la asociación APPA (Asociación para el Progreso de los Pueblos de África), que también e puede leer en su página de Internet En Arenas Movedizas.