El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante su intervención en la inauguración del Foro Empresarial Spain-India Business Summit. | Pool Moncloa/Fernando Calvo. Bombay (República de la India) – 29.10.2024

España
Vozpopuil (24/11/2024)
El presidente despegó de Bombay minutos antes del primer comité de crisis al que no se conectó de forma telemática

Pedro Sánchez decidió permanecer más de cuatro horas sin agenda oficial en la India, el pasado 29 de octubre, cuando el río Magro ya estaba inundando la localidad valenciana de Utiel. El presidente del Gobierno y su esposa, Begoña Gómez, que le acompañó en este viaje oficial, optaron por dar un paseo y celebrar una cena privada al margen de su agenda oficial a la misma hora que la DANA provocaba las primeras víctimas mortales en Castilla-La Mancha y la Comunidad Valenciana.

El último acto que consta en la agenda del jefe del Ejecutivo, una rueda de prensa, se celebró entre las 15.45 y las 16.15 -hora española-. Antes había visitado los estudios de cine Yash Raj Films de Bollywood, entre las 13 y las 15.30 horas. Pero en lugar de emprender el viaje de regreso a España, finalizada su comparecencia ante los medios de comunicación, como suele ser habitual, Sánchez decidió prolongar su viaje al margen de la agenda oficial cuatro horas y media más.

Aunque Moncloa se niega a revelar con exactitud que hicieron durante esas horas el jefe del Ejecutivo y su esposa, que no fueron vistos por parte de la prensa entre el fin de la rueda de prensa y el despegue del avión, Vozpópuli ha podido confirmar que dieron un paseo por Bombay y fueron a comer alguna cosa juntos. Lejos de las cámaras y de la presión mediática a la que es sometida Begoña Gómez, desde que fue imputada a mediados de este mismo año.

El avión presidencial, con la pareja a bordo, además de los ministros Óscar Puente y Jordi Hereu y los empresarios y los periodistas que les acompañaban, despegó del aeropuerto de Bombay alrededor de las 20.30 hora española. Casi la una de la madrugada en la India. Unos minutos antes, Sánchez, a través de su red social X, colgó un tuit afirmando que «sigo de cerca y con preocupación las informaciones sobre las personas desaparecidas y los daños causados por la DANA en las últimas horas

Pese a esa preocupación, no obstante, el jefe del Ejecutivo no se conectó de forma telemática a la reunión del primer comité de crisis que presidió unos minutos más tarde la presidenta en funciones, María Jesús Montero. Sánchez lo podría haber hecho desde la India, retrasando ligeramente la salida del avión, que ya había obligado a retrasar durante más de cuatro horas para tener ese plan privado con Begoña Gómez.

Da la casualidad que ese paseo y esa cena que ambos mantuvieron en la India el día de la catástrofe, se produjo a la misma hora que en España el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, celebraba su polémico almuerzo de trabajo en un restaurante cercano a su despacho con la periodista Maribel Vilaplana.

Escala en Omán y llegada a España

Tras cuatro horas de viaje, el Airbus que trasladaba al presidente del Gobierno hizo una escala técnica más larga de lo que es habitual en el aeropuerto de Omán. La aeronave del Ejército del Aire y del Espacio, debido a su capacidad, está obligada a realizar una parada cuando realiza trayectos largos para repostar.

Pero este tipo de paradas normalmente no superan la hora. La madrugada del 29 al 30 de octubre, cuando los muertos en la Comunidad Valenciana se empezaban a contar por decenas, el avión de Sánchez estuvo parado más tiempo de lo habitual, superando las tres horas. Durante ese lapso de tiempo, indican fuentes gubernamentales, estuvo recibiendo la actualización de la situación.

El presidente finalmente llegó a España a las 10.30 de la mañana, concretamente a la base militar de Torrejón de Ardoz, desde donde se desplazó directamente al Palacio de la Moncloa. Allí, antes de presidir la segunda reunión del comité de crisis, compareció de forma enlatada ante la ciudadanía.

Dos aviones a su disposición
En este tipo de viajes, cuando se superan las cinco horas de distancia entre Madrid y el país que se visita, el presidente del Gobierno siempre dispone de dos aviones a su disposición. Un Falcon, un modelo más pequeño con una capacidad para diez personas, viaja en vacío tras el avión más grande para tener una aeronave disponible en caso de un fallo técnico y tener que volver a España de urgencia, si se produce una situación de tal gravedad como la del pasado 29 de octubre.

Fuente:
Vozpopuli.


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