La Thatcher
Internacional
Pablo Cingolani (10/4/2013)
Ella, y Galtieri, fueron los responsables principales de la muerte violenta de más de un millar de jóvenes argentinos, en guerra y por las secuelas de esa guerra.
Tal para cual y dos fachos: una política neurótica y un milico alcohólico, que aparte de conducir a esos jóvenes a una aventura militar, manipulando una causa justa, ya era responsable de otras muchas otras muertes, como ex comandante del II Cuerpo de Ejército, cuando tuvo bajo su cargo una cuota de responsabilidad estratégica cuando el terrorismo de estado y la dictadura militar encabezada por Videla, asolaban Argentina.
A La Thatcher, a la futura baronesa, le vino como anillo al dedo que Leopoldo Fortunato se invada las Malvinas, ya como Comandante en Jefe y presidente de una usurpada República Argentina: con el contraataque, y por el “honor” del Imperio, tenía la pantalla ideal para cubrir sus abusos y sus represiones que estaban destrozando al proletariado inglés y reconvirtiendo la economía de esas otras islas que forman la Gran Bretaña al neoliberalismo más secante, de manera pionera en el mundo y con una eficiencia brillante, de cirugía quirúrgica, de cirugía mayor.