El proyecto Bolivariano en el Siglo XXI
Bolivia
Andrés Soliz Rada (22/8/2016)
El proyecto bolivariano es mucho más que un sueño considerado inalcanzable por los centros de poder mundial. Sin embargo, mientras el sueño bolivariano siga siendo un sueño, la Unión Europea (pese al traspié del Brexit), continuará ofreciendo a los débiles países latinoamericanos, incluyendo a los más progresistas, como Cuba, Bolivia y Ecuador (por separado), tratados de libre comercio sin mencionar que las subvenciones a su agricultura ascienden a 250 mil millones de dólares anuales y que cada vaca holandesa se beneficia con una subvención de alrededor de 18.000 euros anuales, lo que llevó a más de un creyente en la trasmigración a desear convertirse en vaca holandesa en su próxima vida.
Latinoamericana no ha cambiado demasiado desde que el mexicano José Vasconcelos nos recordara, hace casi cien años, que “nuestras naciones surgieron a la vida independiente como los restos de un naufragio… cada nación iberoamericana, si se exceptúa el Brasil, aparece como un aborto antes que como un fruto. La madre enferma que era España no tuvo poder para arrojar de tierras y mares a los agentes ingleses que nos urgían a la discordia, y salimos a la vida obligados por el forceps de la intriga extranjera, antes que el pellejo adquiriera consistencia”.