España
Espacios Europeos (15/12/2018)
A ver si va a ser verdad que Dios existe y éste se llama Baltasar Garzón. Lo decimos porque los creyentes aseguran que el señor que nunca nadie ha visto (Dios) está en todas partes. Y, efectivamente, el ex juez Garzón también está en todas partes.
Cerró periódicos, encubrió a torturadores, generó gastos al Estado vía indemnizaciones porque encarceló a gente que luego salió a la calle sin cargos… Quiso hacer política con el PSOE pero no le salió bien el intento. Oportunista hasta la saciedad, se acercó al caso Pinochet cuando se intentó que fuera juzgado. También asomó en el de Julián Assange. Va de izquierdas, aunque dista mucho más que muchísimo de serlo, y fundó junto a otros comedores de la sopa boba (llamazares, por ejemplo) el partido Actúa. En fin, que ha estado en todas partes y lo sigue estando, como Dios. ¿Será Dios?
Se informó hace un tiempo que Garzón comió con el ex comisario Villarejo y otras personas. Pues bien, como hemos titulado, ahora un juzgado le investigará por ese caso.
La investigación la llevará a cabo el juez de Instrucción número 50 de Madrid, Esteban Vega, que ya ha admitido a trámite la querella presentada por Pablo Crespo, el lugarteniente de Francisco Correa en la trama Gürtel.
A Baltasar Garzón se le atribuye una “confabulación extraprocesal” con el ex comisario José Manuel Villarejo para preparar la operación contra la trama de corrupción y así “perjudicar al Partido Popular”.
Crespo, condenado a 37 años y medio de prisión por la primera época de actividades de la trama corrupta, basa su querella en el audio grabado por Villarejo, en prisión por el ‘caso Tándem’, en el que se investigan las cloacas policiales, durante una comida en octubre 2007, a la que también asistió la actual ministra de Justicia, Dolores Delgado.
La querella, presentada por un delito de prevaricación judicial, sostiene que de estos audios adelantados por el digital Moncloa.com se desprende que el ex comisario general de Información Juan Antonio González y el que fuera jefe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) José Luis Olivera, el ex comisario Gabriel Fuentes y el propio José Manuel Villarejo se habrían reunido un día antes de la presentación de la querella de Anticorrupción, es decir el 5 de agosto de 2008, para la “construcción del ‘caso Gürtel”. A esas alturas de la conversación, Garzón y Delgado ya se habían marchado.
El auto de admisión señala que los hechos denunciados “presentan características que hacen presumir la posible existencia de delito/s de prevaricación judicial”. La resolución pide librar un informe al Consejo General del Poder Judicial para informarse de la situación en la que se encuentra Baltasar Garzón, que actualmente ejerce de abogado tras su condena por prevaricación precisamente por el ‘caso Gürtel’. También pide al Decanato de la Audiencia Nacional información sobre el sistema de reparto de asuntos de los juzgados centrales de instrucción.
¡Vaya con el señor Garzón! Está claro que el anonimato no es lo suyo.
Fuente. Insurgente.