weja-chicampoWeja Chicampo Puye (13/7/2009)
Lo que está marcando la diferencia entre los viajes anteriores del ministro de Asuntos Exteriores español Miguel Ángel Moratinos a Guinea Ecuatorial es la presencia del anciano y actual senador Manuel Fraga Iribarne. Desde que se habla de Guinea Ecuatorial como Estado independiente, muchos políticos guineanos han mencionado a Fraga como uno de los actores de nuestra  independencia, por ser el enviado especial y representante del Gobierno español en el momento del traspaso de poderes de la ex colonia española en el Golfo de Guinea.

Para muchos jóvenes guineanos y generaciones enteras, dos o tres, tener a Fraga en Guinea Ecuatorial después de más de 40 años, supone un antes y un después para nuestra república. Guinea Ecuatorial durante estas cuatro décadas ha vivido azotada por un régimen totalitario y sucesorio. Muchos jóvenes han quedado impactados al ver al anciano político español de vuelta a nuestras tierras, para vivir in situ los cambios que se han operado en el país. Pero, ¿qué cambios?

Las cosas siguen donde estaban hace décadas atrás. De la colonia y dictadura franquista seguimos enquistados en el sojuzgamiento y dictadura nguemista. Por lo que hablar de cambios en sentido positivo, solo puede mencionarse si incluimos la presencia de los hidrocarburos en la vida guineana desde la década de los 90, cuya acción y beneficio social queda por ver.

Con anterioridad el ministro Moratinos ha viajado a Guinea Ecuatorial con empresarios y parlamentarios. Las promesas de cambio hacia una democracia real han quedado en solo eso, promesas y compromisos sin cumplir.

En este viaje, toda la atención popular se ha centrado en la presencia del ex ministro de Información y Turismo de Franco. Su presencia marca la diferencia. Para muchos supone el nacimiento de una nueva esperanza de cara al futuro. Sin ataduras ni dictaduras. Sin opresiones ni represiones. Libertad en sí para un pueblo humillado y pisoteado desde hace décadas por sus propios dirigentes.  Una esperanza más para que cantemos libertad como recoge el himno nacional.

El señor Fraga, quien ha estado ligado con el suceder de los acontecimientos de nuestro país, ha estado indirectamente preocupado por su evolución y desarrollo, no solo en sentido económico sino también social. Pero con el transcurso del tiempo ha quedado demostrado que las predicciones de los políticos bubis de 1968 se han cumplido con creces. Señalaban que Guinea Ecuatorial debería caminar con la presencia española hasta llegar a la madurez. Pero el afán de unos pudo más que los otros, y hoy tenemos lo que tenemos; dictadura blanda o dura, pero en sí, dictadura.

La presencia de don Manuel Fraga Iribarne va a significar un antes y un después para nuestra república. El antes ya lo tenemos todos en la memoria. Nos queda el después, cuya trayectoria habrá de trazarla quizás con la margarita en la mano entonando el «te quiero, no te quiero» para ver qué nos queda en las manos como resultado de tantas idas y venidas.

Del viaje de Moratinos yfraga-en-guinea la delegación que le acompaña, solo nos queda recordar unas frases que siempre mi madre repetía cuando quería sentarnos la cabeza en su sitio: «Tantas vueltas y revueltas, tantas idas y venidas, quiero que me digas mi buen amigo, ¿son de alguna utilidad?»

Espero que esta vez estas vueltas sí sean de alguna utilidad, y así abrir un nuevo camino de relaciones especiales y bilaterales entre España y Guinea Ecuatorial.

No debería tratarse de unas relaciones bilaterales de un gobierno democrático (España) y un gobierno dictatorial (Guinea Ecuatorial), sino aperturar unas relaciones  entre dos pueblos que quieren vivir en armonía, y caminar juntos y sin ataduras ni opresión, hacia un espacio más saludable para ambos países.

Unas relaciones que se alejen de la explotación, corrupción y saqueamientos de nuestras riquezas y recursos al tratarse Guinea Ecuatorial de un país tercermundista. Pues una cosa es el petróleo y demás hidrocarburos a explotar, otra es la realidad socioeconómica, política y cultural de nuestro país.

N. de  la R.
Weja Chicampo Puye
, responde con este texto a nuestra petición que, con motivo del reciente viaje de una delegación española a Guinea Ecuatorial,  hemos pedido a los líderes políticos guineanos. Hasta ahora hemos publicado la opinión de Samuel Mbá Mombé, doctor en Medicina y líder político, Severo Moto (Partido del Progreso y del Gobierno en el Exilio de Guinea Ecuatorial)y Gabriel Nse Obiang Obono (Candidatura Independiente).
La publicación de estas «respuestas» la hacemos por riguroso turno de recepción.